La fiebre es un síntoma común del paludismo. Los cuidadores y los trabajadores sanitarios utilizan con frecuencia fármacos antipiréticos (fármacos contra la fiebre) y medidas físicas (como una esponja tibia) para controlar la fiebre en los adultos y los niños con paludismo. Algunos investigadores han cuestionado la creencia de que el control de la fiebre con fármacos antipiréticos es beneficioso. Ellos indican que en realidad puede prolongar el tiempo que tarda el parásito del paludismo en desaparecer de la sangre. Esta revisión buscó evidencia a partir de los tipos de estudios de investigación apropiados que analizan estas cuestiones. Se encontraron sólo unos pocos ensayos pequeños y no se pudo obtener suficiente información de estos ensayos para poder concluir si los fármacos antipiréticos ayudan realmente a resolver los síntomas del paludismo o prolongan la enfermedad.
No se sabe si los antipiréticos alteran el tiempo de eliminación del parásito. Para determinar si vale la pena investigarlo o no, habría que determinar si se trata de una cuestión importante que se debe dilucidar mediante ensayos de intervención.
La fiebre es frecuente en el paludismo y los fármacos y la esponja se utilizan ampliamente para el alivio sintomático. Algunos investigadores han indicado que la reducción de la fiebre puede prolongar la enfermedad palúdica.
El objetivo de esta revisión fue evaluar si los tratamientos para reducir la fiebre en el paludismo influyen en el curso de la enfermedad.
Se realizaron búsquedas en el registro de ensayos del Grupo Cochrane de Enfermedades Infecciosas (Cochrane Infectious Diseases Group) (junio de 2012), el Registro Cochrane Central de Ensayos Controlados (Cochrane Central Register of Controlled Trials) (The Cochrane Library, número 6, 2012), MEDLINE (1966 a junio de 2012); EMBASE (1980 a junio de 2012) y LILACS (junio de 2012). Se estableció contacto con investigadores y organizaciones que trabajan en el campo para poder identificar otros ensayos no publicados o en curso.
Ensayos controlados aleatorizados de medidas de reducción de la fiebre en adultos o niños con paludismo confirmado.
Dos autores de la revisión aplicaron de forma independiente los criterios de inclusión. Se extrajeron los datos de los ensayos que cumplieron con los criterios preestablecidos con el uso de un formulario estándar de extracción de datos. Para los datos continuos se calcularon las diferencias de medias con intervalos de confianza (IC) del 95%. Se utilizó GRADE para evaluar y resumir la calidad de la evidencia.
Diez ensayos controlados aleatorizados con 990 participantes, que incluyeron adultos y niños, cumplieron los criterios de inclusión. Todos fueron ensayos a pequeña escala con limitaciones metodológicas y se realizaron en una variedad de pacientes. Algunos ensayos detectaron un impacto de los fármacos antipiréticos en el tiempo de eliminación de la fiebre, mientras que otros no lo hicieron. En cuanto a la eliminación del parásito, no se demostró una influencia clara de la antipiresis (seis ensayos, 423 participantes, evidencia de calidad muy baja). No se detectaron diferencias en el número ni en la gravedad de los eventos adversos entre los fármacos antipiréticos y control.
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