Pregunta de la revisión
Evaluar los efectos beneficiosos y perjudiciales de los medicamentos en personas con inestabilidad emocional tras un ictus.
Antecedentes
A menudo después de un ictus se produce inestabilidad emocional. La labilidad o inestabilidad emocional significa que la persona tiene dificultades para controlar su conducta emocional. Después de un ictus las personas pueden comenzar a llorar de repente o, con menor frecuencia, reír sin razón aparente. Es angustioso para la persona en concreto y sus cuidadores. Los antidepresivos, que se sabe que son útiles para aquellas personas con depresión, podrían ser un tratamiento eficaz para la inestabilidad emocional tras un ictus, pero se han realizado muy pocos ensayos controlados aleatorizados en esta área. Los ECA son un tipo de estudios en los que los participantes se asignan al azar a dos o más grupos de tratamiento. Es la mejor manera de garantizar que los grupos de participantes sean similares y que los investigadores y los participantes no sepan quién está en cada grupo.
Fecha de la búsqueda
Los estudios se identificaron mediante búsquedas realizadas el 26 de mayo de 2022.
Características de los estudios
En la revisión se incluyeron siete ensayos controlados aleatorizados con 239 personas con inestabilidad emocional, que informaron sobre el uso de antidepresivos para su tratamiento. La cifra de personas incluidas en los estudios varió de 10 a 92. La media/mediana de edad de los participantes varió entre 57,8 y 73 años. Los estudios procedían de Europa (Reino Unido: 1; Dinamarca: 1; Escocia: 1, y Suecia: 1); Asia (Corea del Sur: 1; y Japón: 1); y los EE.UU (1).
Resultados clave
No se identificaron estudios nuevos en esta actualización de la búsqueda. Se incluyeron siete estudios con 239 personas. Sin embargo, dos estudios no estaban disponibles en el formato adecuado para incluirlos en el análisis. Por lo tanto, en los análisis solo se incluyeron cinco estudios con 213 personas. No se sabe con certeza si los antidepresivos afectan al número de personas con una reducción de al menos un 50% en las manifestaciones emocionales, el llanto y las puntuaciones en los cuestionarios que miden la risa o el llanto incontrolables, pero no tuvieron ningún efecto en las puntuaciones de labilidad (frecuencia de los cambios de humor) ni en el hecho de que un médico pensara que había habido una mejora en comparación con el placebo. No se encontraron estudios sobre otros tipos de medicamentos. Seis estudios informaron sobre la mortalidad y no encontraron diferencias entre quienes tomaron antidepresivos y quienes no.
¿Cuáles son las limitaciones de la evidencia?
La confianza en la evidencia es moderada a muy baja, y los resultados de los estudios de investigación posteriores podrían diferir de los resultados de esta revisión. La confianza es limitada porque los estudios incluidos eran pequeños y no había consistencia entre los estudios en la forma de medir la inestabilidad emocional.
Conclusión
No se sabe con certeza si los medicamentos antidepresivos reducen los estallidos de llanto o de risa. Se necesitan más estudios que evalúen e informen de forma sistemática sobre los efectos no deseados o perjudiciales de un tratamiento para garantizar que los beneficios superen los riesgos.
Los antidepresivos podrían reducir la frecuencia y la intensidad de los episodios de llanto o de risa al compararlos con placebo, según evidencia de certeza muy baja. Las conclusiones de esta revisión se deben calificar a partir de la consideración de varias deficiencias metodológicas en los ensayos e interpretarse con cautela a pesar de que el efecto es muy grande. El efecto no parece ser específico de un fármaco o clase de fármaco. Se necesitan datos más fiables antes de poder establecer conclusiones apropiadas sobre el tratamiento de la labilidad emocional posterior al accidente cerebrovascular. Los futuros investigadores de ensayos que estudien el efecto de los antidepresivos en personas con labilidad emocional tras un accidente cerebrovascular deberían considerar la posibilidad de desarrollar y utilizar un método estándar para diagnosticar el labilidad emocional, determinar su gravedad y evaluar los cambios en el tiempo; proporcionar un tratamiento con una duración y un seguimiento suficientes para evaluar mejor las tasas de recaída o de mantenimiento; e incluir una evaluación cuidadosa y el informe completo de los eventos adversos.
Los antidepresivos podrían ser útiles en el tratamiento del llanto anormal asociado con el accidente cerebrovascular. Esta es una actualización de una revisión Cochrane publicada por primera vez en 2004 y actualizada por última vez en 2019.
Evaluar los efectos beneficiosos y perjudiciales del tratamiento farmacéutico en personas con labilidad emocional tras un accidente cerebrovascular.
Se realizaron búsquedas en el registro del Grupo Cochrane de Accidentes cerebrovasculares (Cochrane Stroke Group), CENTRAL, MEDLINE, Embase, otras cuatro bases de datos y tres registros de ensayos (mayo de 2022).
Se incluyeron ensayos controlados aleatorizados (ECA) y ensayos cuasialeatorizados que compararan fármacos psicotrópicos con placebo en personas con accidente cerebrovascular y labilidad emocional (también conocida como inestabilidad emocional, llanto o risa patológicos, trastorno de expresión emocional involuntaria y afecto pseudobulbar).
Dos autores de la revisión, de forma independiente, seleccionaron los ensayos, evaluaron el riesgo de sesgo, extrajeron los datos de todos los ensayos incluidos y utilizaron GRADE para evaluar la certeza del conjunto de evidencia. Se calculó la diferencia de medias (DM) o la diferencia de medias estandarizada (DME) para los datos continuos, y la razón de riesgos (RR) para los datos dicotómicos, con intervalos de confianza (IC) del 95%. La heterogeneidad se evaluó con el estadístico I2. Las medidas principales de labilidad emocional fueron la proporción de participantes que lograron al menos una reducción del 50% en la conducta emocional anormal al final del tratamiento, la mejoría de la puntuación en el Center for Neurologic Study - Lability Scale (CNS-LS), la Clinician Interview-Based Impression of Change (CIBIC) o la disminución del llanto.
No se identificaron ensayos nuevos en esta actualización. Se incluyeron siete ensayos con un total de 239 participantes. Dos ensayos tuvieron un diseño cruzado (cross-over), pero no se dispuso de datos de desenlaces de la primera fase (previa al cruzamiento) en un formato apropiado para su inclusión como un ensayo controlado aleatorizado (ECA) paralelo. Por lo tanto, los resultados de la revisión se basan en cinco ensayos con 213 participantes en total. No se sabe con certeza si la fluoxetina aumenta el número de personas que presentan una reducción del 50% de la labilidad emocional en comparación con el placebo (RR 0,26; IC del 95%: 0,09 a 0,77; p = 0,02; un ensayo, 19 participantes) porque la certeza de la evidencia es muy baja.
La sertralina podría producir poca o ninguna diferencia en las puntuaciones de la CNS-LS y en las puntuaciones de la CIBIC en comparación con el placebo (RR 0,20; IC del 95%: 0,03 a 1,50; p = 0,12; un ensayo, 28 participantes; evidencia de certeza baja). Los antidepresivos probablemente aumenten el número de personas que experimentan una reducción del llanto (RR 0,32; IC del 95%: 0,12 a 0,86; p = 0,02; tres ensayos, 164 participantes; evidencia de certeza moderada). No se encontraron ensayos que evaluaran el efecto de otras intervenciones farmacéuticas.
Solo los autores de dos ensayos registraron sistemáticamente eventos adversos e informaron sobre ellos, lo que dio lugar a datos limitados sobre los posibles efectos perjudiciales del tratamiento. Seis ensayos informaron sobre la muerte como un evento adverso y no encontraron diferencias entre los grupos (antidepresivos versus placebo) en el número de muertes notificadas (RR 0,59; IC del 95%: 0,08 a 4,50; p = 0,61; 172 participantes; evidencia de certeza moderada).
Esta revisión proporciona evidencia de certeza muy baja a moderada de que los antidepresivos podrían reducir la frecuencia y la gravedad de la labilidad emocional. Los ensayos incluidos eran pequeños y tenían cierto grado de sesgo.
La traducción de las revisiones Cochrane ha sido realizada bajo la responsabilidad del Centro Cochrane Iberoamericano, gracias a la suscripción efectuada por el Ministerio de Sanidad del Gobierno de España. Si detecta algún problema con la traducción, por favor, contacte con comunica@cochrane.es.