Pregunta de la revisión
Los autores Cochrane examinaron la evidencia sobre el efecto de la instilación de diferentes medios de contraste en las trompas de Falopio en mujeres con subfertilidad.
Antecedentes
La obstrucción de las trompas de Falopio significa que los espermatozoides no pueden llegar al óvulo en la trompa. Establecer si las trompas están abiertas (permeables) es importante y requiere que se introduzcan medios de contraste (colorantes) a través de las trompas, ya sea en el momento de una radiografía (histerosalpingografía) o durante una operación de mínimo acceso (laparoscopia). Se ha informado que muchas mujeres conciben en los primeros tres a seis meses después de la instilación de las trompas, aunque no está claro por qué ocurre esto. Se ha debatido si se debe utilizar un medio de contraste oleosoluble (MCOS) o un medio de contraste hidrosoluble (MCHS), ya que puede influir en los nacidos vivos. Un episodio adverso importante durante el procedimiento es el reflujo del medio de contraste hacia la sangre o los vasos linfáticos, a lo que se le llama intravasación, que generalmente es asintomática.
Características de los estudios
La evidencia se actualizó hasta abril de 2020. Se incluyeron los ensayos controlados aleatorizados (ECA) que analizaron el efecto de la instilación en las trompas de un MCOS y un MCHS, entre sí o con ningún tratamiento, en mujeres con subfertilidad. Estas mujeres no habían podido concebir después de al menos seis meses de coito sin protección. También se examinaron las tasas de episodios adversos, que incluyen la intravasación, la infección y la hemorragia.
Resultados clave
En esta revisión sistemática se incluyeron 15 ensayos con 3864 mujeres. En comparación con ningún tratamiento, la instilación en las trompas de un MCOS puede aumentar las probabilidades de un nacido vivo y un embarazo clínico. Lo anterior indica que si se supone que las probabilidades de tener un nacido vivo con ningún tratamiento son del 11%, las probabilidades después de la instilación en las trompas de un MCOS estarían entre el 16% y el 46%. No se sabe con certeza si la instilación en las trompas de un MCHS aumenta el número de nacidos vivos o de embarazos clínicos, en comparación con ningún tratamiento. Lo anterior indica que si se supone que las probabilidades de tener un nacido vivo con ningún tratamiento son del 21%, las probabilidades después de la instilación en las trompas de un MCHS estarían entre el 15% y el 33%. En la comparación entre un MCOS y un MCHS, los datos no fueron suficientemente similares como para combinarlos en un metanálisis. La instilación en las trompas de un MCOS puede aumentar las probabilidades de un embarazo clínico. Con respecto a los episodios adversos, la instilación en las trompas de un MCOS probablemente aumentó las probabilidades de intravasación (asintomática), en comparación con la instilación en las trompas de un MCHS. Lo anterior indica que si se supone que las probabilidades de intravasación después de la instilación en las trompas de un MCHS son del 1%, las probabilidades después de la instilación en las trompas de un MCOS estarían entre el 2% y el 9%. La evidencia sobre otros episodios adversos se informó de manera deficiente y no fue concluyente.
Calidad de la evidencia
La calidad general de la evidencia fue muy baja a moderada para todas las comparaciones. Las limitaciones principales fueron el riesgo de sesgo, la imprecisión y la inconsistencia. Hubo muy pocos estudios para evaluar el riesgo de sesgo de publicación.
La evidencia indica que, en comparación con ningún tratamiento, la instilación en las trompas de un MCOS puede aumentar las probabilidades de nacidos vivos y de embarazo clínico, mientras que no se sabe si la instilación en las trompas de un MCHS mejora estos desenlaces. En comparación con la instilación en las trompas de un MCHS, un MCOS puede mejorar el embarazo clínico, mientras que no fue posible realizar un metanálisis para los nacidos vivos debido a la heterogeneidad. La evidencia también indica que el MCOS se asocia con un mayor riesgo de intravasación asintomática. En general, los episodios adversos, especialmente los episodios adversos a largo plazo, se informaron de manera deficiente en los estudios.
Establecer el análisis de subgrupos de las trompas de Falopio es una investigación diagnóstica que se le realiza de manera habitual a las mujeres con subfertilidad. Lo anterior se logra generalmente mediante la instilación de un medio de contraste a través de las trompas y la visualización de la permeabilidad en las radiografías, la ecografía o la laparoscopia. Se ha observado que muchas mujeres conciben en los primeros tres a seis meses después de la instilación del contraste en las trompas, lo que plantea la posibilidad de que dicha instilación también pueda ser un tratamiento para la infertilidad. Se ha debatido sobre el medio de contraste que se debe utilizar (soluble en agua o en aceite), ya que puede influir en las tasas de embarazo. Un episodio adverso importante durante la instilación del contraste en las trompas es la intravasación (reflujo del medio de contraste hacia la sangre o los vasos linfáticos), que puede provocar una embolia, aunque es asintomática en la mayoría de los casos.
Evaluar la efectividad y la seguridad de la instilación en las trompas de medios de contraste oleosolubles (MCOS) e hidrosolubles (MCHS), con respecto a los desenlaces de fertilidad subsiguientes en mujeres con subfertilidad.
Se realizaron búsquedas en el registro especializado de ensayos controlados del Grupo Cochrane de Ginecología y fertilidad (Cochrane Gynaecology and Fertility Group), MEDLINE, Embase, CENTRAL, PsycINFO, en las listas de referencias de los artículos identificados y en los registros de ensayos. La búsqueda más reciente se realizó en abril de 2020.
Ensayos controlados aleatorizados (ECA) que compararon la instilación en las trompas de un MCOS y un MCHS, entre sí o con ningún tratamiento, en mujeres con subfertilidad.
Dos autores de la revisión de forma independiente seleccionaron los ensayos, evaluaron el riesgo de sesgo y extrajeron los datos. Se estableció contacto con los autores de los estudios para obtener información adicional. La calidad general de la evidencia se evaluó mediante los criterios GRADE.
En esta revisión sistemática se incluyeron 15 ensayos con 3864 mujeres. En general, la calidad de la evidencia varió de muy baja a moderada: las principales limitaciones fueron el riesgo de sesgo, la heterogeneidad y la imprecisión.
MCOS versus ningún tratamiento
En esta comparación se incluyeron cuatro estudios (506 mujeres).
La instilación en las trompas de un MCOS puede aumentar las probabilidades de nacidos vivos (odds ratio [OR] 3,27; intervalo de confianza [IC] del 95%: 1,57 a 6,85; tres ECA, 204 mujeres, I2 = 0; evidencia de calidad baja). Lo anterior indica que si se supone que las probabilidades de tener un nacido vivo con ningún tratamiento son del 11%, las probabilidades después de la instilación en las trompas de un MCOS estarían entre el 16% y el 46%.
El lavado de trompas con MCOS puede aumentar las probabilidades de un embarazo clínico (OR 3,54; IC del 95%: 2,08 a 6,02; cuatro ECA, 506 mujeres; I2 = 18%, evidencia de calidad baja). Lo anterior indica que si se supone que las probabilidades de embarazo clínico con ningún tratamiento son del 9%, las probabilidades después de la instilación en las trompas de un MCOS estarían entre el 17% y el 37%.
Ningún estudio midió la intravasación u otros episodios adversos como infección, hemorragia y anomalías congénitas.
MCHS versus ningún tratamiento
En esta comparación solo se incluyó un estudio (334 mujeres).
No se sabe con certeza si la instilación en las trompas de un MCHS aumenta el número de nacidos vivos, en comparación con ningún tratamiento (OR 1,13; IC del 95%: 0,67 a 1,91; un ECA; 334 mujeres; evidencia de calidad baja). Lo anterior indica que si se supone que las probabilidades de tener un nacido vivo con ningún tratamiento son del 21%, las probabilidades después de la instilación en las trompas de un MCHS estarían entre el 15% y el 33%.
No se sabe con certeza si la instilación en las trompas de un MCHS aumenta los embarazos clínicos, en comparación con ningún tratamiento (OR 1,14; IC del 95%: 0,71 a 1,84; un ECA; 334 mujeres; evidencia de calidad baja). Lo anterior indica que si se supone que las probabilidades de un embarazo clínico con ningún tratamiento son del 27%, las probabilidades después de la instilación en las trompas de un MCHS estarían entre el 29% y el 40%.
En un estudio (334 mujeres) se informó de un caso de infección pélvica en el grupo de MCHS y ningún caso de infección en el grupo de ningún tratamiento. No se realizó un metanálisis debido a que los episodios fueron poco frecuentes.
Ningún estudio midió la intravasación u otros episodios adversos como infección, hemorragia y anomalías congénitas.
MCOS versus MCHS
En esta comparación se incluyeron seis estudios (2598 mujeres).
Tres estudios informaron sobre los nacidos vivos, incluidos dos con un mayor número de nacidos vivos en el grupo de MCOS (OR 1,64; IC del 95%: 1,27 a 2,11; 1119 mujeres; OR 3,45; IC del 95%: 1,97 a 6,03; 398 mujeres); y uno no encontró evidencia suficiente de una diferencia entre los grupos (OR 0,92; IC del 95%: 0,60 a 1,40; 533 mujeres). Debido a la significativa heterogeneidad observada (I2 = 86%) no se realizó un metanálisis.
La instilación en las trompas de un MCOS probablemente aumentó las probabilidades de intravasación (asintomática), en comparación con la instilación en las trompas de un MCHS (OR 5,00; IC del 95%: 2,25 a 11,12; cuatro ECA, 1912 mujeres; I2 = 0, evidencia de calidad moderada). Lo anterior indica que si se supone que las probabilidades de intravasación después de la instilación en las trompas de un MCHS son del 1%, las probabilidades después de la instilación en las trompas de un MCOS estarían entre el 2% y el 9%.
La instilación en las trompas de un MCOS puede aumentar las probabilidades de embarazo clínico (OR 1,42; IC del 95%: 1,10 a 1,85; seis ECA, 2598 mujeres; I2 = 41%, evidencia de calidad baja). Lo anterior indica que si se supone que las probabilidades de un embarazo clínico después de la instilación en las trompas de un MCHS son del 26%, las probabilidades después de la instilación en las trompas de un MCOS estarían entre el 28% y el 39%.
No se sabe con certeza si la instilación en las trompas de un MCOS disminuye las probabilidades de infección (OR 0,22; IC del 95%: 0,04 a 1,22; dos ECA; 662 mujeres; I2 = 0, evidencia de calidad muy baja) o de hemorragia (OR 0,65; IC del 95%: 0,40 a 1,06; dos ECA; 662 mujeres; I2 = 0, evidencia de calidad muy baja).
Se informó de tres recién nacidos con anomalías congénitas en el grupo de MCOS, mientras que en un estudio no se informaron anomalías congénitas en el grupo de MCHS (1119 mujeres). No se realizó un metanálisis debido a que los episodios fueron poco frecuentes.
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