En ocasiones se les ofrece a los conductores convictos por consumo de alcohol la opción de un castigo estándar, o de un bloqueo de encendido que se instala en su automóvil durante un período fijo. Para operar un vehículo equipado con un dispositivo de bloqueo, el conductor debe dar primero una muestra de aliento. Si la concentración de alcohol en el aliento de la muestra es demasiado alta, el vehículo no arrancará. Se han realizado varios estudios para determinar si el bloqueo impide que los conductores que beben alcohol vuelvan a delinquir. La mayoría de estos estudios no han sido de alta calidad. El bloqueo parece reducir la reincidencia mientras esté instalado en el vehículo, pero no hay un efecto beneficioso a largo plazo después de que se haya retirado. Sin embargo, se necesitan más estudios de buena calidad para confirmar estos resultados. El bajo porcentaje de convictos que optan por la colocación de un dispositivo de bloqueo también dificulta establecer conclusiones firmes sobre su eficacia.
Para eliminar el posible sesgo de selección es necesario realizar más ECA en esta área para que se pueda determinar la efectividad, así como la eficacia. El programa de bloqueo parece ser efectivo mientras el dispositivo está instalado en el vehículo del infractor. Los estudios deben abordar formas de mejorar las tasas de reincidencia a largo plazo, ya que los principales retos son las tasas de participación, el cumplimiento y la durabilidad.
Un dispositivo de bloqueo de encendido forma parte de un programa multidimensional destinado a reducir la reincidencia de los conductores convictos por consumo de alcohol. Para operar un vehículo equipado con un dispositivo de bloqueo de encendido, el conductor debe proporcionar primero una muestra de aliento. Si la concentración de alcohol en el aliento del espécimen excede el nivel predeterminado, el vehículo no arrancará. Como medida para reducir la elusión del dispositivo (es decir, que alguien más sople en la boquilla), es necesario realizar pruebas al azar mientras el vehículo está en marcha. Otros componentes del programa de conducción bajo los efectos del alcohol incluyen seminarios informativos para el conductor y la descarga de datos del registrador de datos del dispositivo, que registra todos los intentos de prueba y registra todos los pases, advertencias y fracasos.
Evaluar de manera sistemática la efectividad de los programas de bloqueo de encendido con respecto a las tasas de reincidencia de los conductores que consumen alcohol, y examinar las tasas de reincidencia mientras el dispositivo de bloqueo de encendido estaba instalado en el vehículo y después de retirar el dispositivo.
Se realziaron búsquedas en el registro especializado del Grupo Cochrane de Lesiones (Cochrane Injuries Group) (septiembre 2002), MEDLINE (1966 hasta agosto 2002), PubMed (hasta agosto 2002), EMBASE (1980 hasta septiembre 2002), TRANSPORT (1988 hasta 2002, Número 06), CENTRAL (The Cochrane Library 2002, Número 3), The Science Citation Index (1980 hasta septiembre 2002)
National Research Register (2002, Número 3). También se realizaron búsquedas en Internet mediante varios motores de búsqueda.
Ensayos controlados en los que los infractores han sido acusados de conducir bajo los efectos del alcohol y han sido condenados a participar en un programa de bloqueo de encendido o a la pena habitual (ya sea suspensión del permiso o algún tipo de programa de tratamiento). Este estudio no estableció restricciones por el idioma o el estado de publicación.
Se identificaron un ensayo controlado aleatorizado (ECA) y diez ensayos controlados, así como tres ensayos en curso. Se extrajeron los datos relativos a la reincidencia mientras el dispositivo de bloqueo está instalado en el vehículo; después de que el dispositivo de bloqueo se retiró del vehículo y la reincidencia total durante el estudio y se introdujeron en los análisis en RevMan.
El ECA mostró que el programa de bloqueo fue efectivo mientras el dispositivo estuvo instalado en el vehículo (riesgo relativo 0,36; intervalo de confianza del 95%: 0,21 a 0,63). Los ensayos controlados apoyan esta conclusión, con una tendencia general (ya sea en delincuentes por primera vez o en reincidentes) hacia tasas de reincidencia más bajas cuando se instala el dispositivo de bloqueo. Ni el ECA ni los ensayos controlados proporcionan evidencia de que la efectividad de los programas se mantiene una vez que se ha retirado el dispositivo.
La traducción y edición de las revisiones Cochrane han sido realizadas bajo la responsabilidad del Centro Cochrane Iberoamericano, gracias a la suscripción efectuada por el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad del Gobierno español. Si detecta algún problema con la traducción, por favor, contacte con Infoglobal Suport, cochrane@infoglobal-suport.com.