Mensaje clave
• Las intervenciones psicológicas (terapia hablada/de asesoramiento) podrían reducir los síntomas de depresión en adultos con cardiopatía congénita.
• Se necesitan más estudios para definir el mejor tratamiento psicológico para esta población, como la duración, la frecuencia y el tipo de intervención.
¿Qué son las cardiopatías congénitas?
Cardiopatía congénita es un término genérico utilizado para definir una serie de defectos congénitos que afectan al funcionamiento del corazón.
¿Por qué es importante hacer esta revisión?
A veces, los jóvenes y adultos que nacen con problemas de corazón sufren depresión. Además de los medicamentos antidepresivos, los tratamientos para ayudar a reducir la depresión incluyen distintos tipos de terapias de conversación (conocidas como psicoterapia). Los beneficios de seguir un tratamiento con terapia de conversación podrían incluir una reducción de la depresión y una mejoría de la calidad de vida, pero es posible que el tratamiento no ayude a aliviar la depresión.
¿Qué se quiso averiguar?
El objetivo fue examinar los efectos (tanto perjudiciales como beneficiosos) de las intervenciones psicológicas para el tratamiento de la depresión en jóvenes y adultos con cardiopatía congénita.
¿Qué se hizo?
Se actualizaron las búsquedas en la literatura médica hasta marzo de 2023. Se seleccionaron los estudios que cumplían los criterios, se evaluó el riesgo de sesgo para la depresión, se compararon los resultados de estos estudios y se calificó la confianza en la evidencia en base a estos estudios (p. ej., métodos de evaluación y tamaño de la muestra).
¿Qué se encontró?
Se encontraron tres estudios, con un total de 480 participantes con cardiopatía congénita, que analizaron el impacto de las intervenciones psicológicas (terapia de conversación/asesoramiento) sobre la depresión. Las intervenciones psicológicas duraron entre 90 minutos y 3 meses. Estos estudios se realizaron en Canadá, Suecia y los Países Bajos. Los estudios se financiaron con becas del Consejo Nacional de Investigación de los respectivos países.
Los resultados de esta revisión sugieren que una intervención psicológica podría ayudar a reducir los síntomas de depresión en adultos con cardiopatía congénita. Sin embargo, el tipo y la duración de la intervención variaron de un estudio a otro, por lo que es posible que algunas intervenciones apenas contribuyan a reducir la depresión.
¿Cuáles son las limitaciones de la evidencia?
Solo hubo tres estudios que cumplieron los criterios para la revisión, y la certeza de la evidencia fue baja. No hubo evidencia suficiente para establecer conclusiones acerca del efecto de las intervenciones psicológicas (terapia de conversación/asesoramiento) sobre la calidad de vida.
¿Cuál es el grado de actualización de esta evidencia?
Esta evidencia está actualizada hasta marzo de 2023.
Las intervenciones psicológicas podrían reducir la depresión en adultos con cardiopatía congénita en comparación con la atención habitual. Sin embargo, la certeza de la evidencia es baja.
Se necesitan más estudios de investigación para establecer el papel de las intervenciones psicológicas en esta población, y definir la duración óptima, el método de administración y el número de sesiones necesarias para obtener el mayor beneficio.
A pesar de las mejoras en la atención médica, la calidad de vida de los adultos y adolescentes con cardiopatías congénitas sigue viéndose muy afectada por su enfermedad, lo que a menudo conlleva depresión. La psicoterapia, la terapia cognitivo-conductual y otras terapias de conversación podrían ser eficaces en el tratamiento de la depresión tanto en adultos como en jóvenes con cardiopatías congénitas. El objetivo de esta revisión fue evaluar los efectos de tratamientos como la psicoterapia, las terapias cognitivo-conductuales y las terapias conversacionales para tratar la depresión en esta población.
Evaluar los efectos (tanto perjudiciales como beneficiosos) de las intervenciones psicológicas para reducir los síntomas de depresión en adolescentes (de 10 a 17 años) y adultos con cardiopatía congénita. Las intervenciones psicológicas incluyen la terapia cognitivo-conductual, la psicoterapia o la terapia «de conversación/asesoramiento» para la depresión.
Se actualizaron las búsquedas de la revisión Cochrane de 2013 a través de CENTRAL, en otras cuatro bases de datos y en Conference Proceedings Citation Index hasta el 7 de marzo de 2023, y en dos registros de ensayos clínicos hasta febrero de 2021. No se aplicaron restricciones de idioma.
Ensayos controlados aleatorizados (ECA) que comparan intervenciones psicológicas con ninguna intervención en la población con cardiopatía congénita, de a partir de 10 años, con depresión.
Dos autores de la revisión por separado examinaron los títulos y resúmenes y evaluaron los informes de texto completo para su inclusión. Cuando fue necesario, se solicitó más información a los autores. Los datos se extrajeron por duplicado. Se utilizaron los métodos estándar de Cochrane. El desenlace principal fue un cambio en la depresión. Los desenlaces secundarios fueron: aceptabilidad del tratamiento, calidad de vida, reingreso hospitalario, eventos cardiovasculares no mortales, factor de riesgo cardiovascular conductual, economía sanitaria, mortalidad cardiovascular, mortalidad por todas las causas. Se utilizó el método GRADE para evaluar la certeza de la evidencia solo en relación al desenlace principal.
Se identificaron tres ECA nuevos (480 participantes). Los participantes fueron adultos con cardiopatías congénitas. Los estudios incluidos variaron en cuanto a la duración de la intervención (de 90 minutos a 3 meses) y el seguimiento (de 3 a 12 meses), y la depresión se evaluó después de la intervención y durante el seguimiento. La evaluación del riesgo de sesgo identificó un bajo riesgo general de sesgo para el desenlace principal de depresión.
Las intervenciones psicológicas (terapia de conversación/asesoramiento) podrían reducir la depresión más que la atención habitual tanto a los tres meses (diferencia de medias [DM] -1,07; intervalo de confianza [IC] del 95%: -1,84 a -0,30; p = 0,006; I 2 = 0%; dos ECA, 156 participantes; evidencia de certeza baja), como a los 12 meses de seguimiento (DM -1,02; IC del 95%: -1,92 a -0,13; p = 0,02; I 2 = 0%; dos ECA, 287 participantes; evidencia de certeza baja).
No hubo evidencia suficiente para establecer conclusiones acerca del impacto de las intervenciones psicológicas sobre la calidad de vida.
Ninguno de los estudios incluidos informó sobre otros desenlaces de interés.
Debido al escaso número de estudios incluidos, no se realizaron análisis de subgrupos. Hay un estudio pendiente de clasificación.
La traducción de las revisiones Cochrane ha sido realizada bajo la responsabilidad del Centro Cochrane Iberoamericano, gracias a la suscripción efectuada por el Ministerio de Sanidad del Gobierno de España. Si detecta algún problema con la traducción, por favor, contacte con comunica@cochrane.es.