Muchas personas, sobre todo en los países en vías de desarrollo, se intoxican con plaguicidas organofosforados (PO) utilizados en la agricultura o para matar insectos en el hogar. La intoxicación puede ser accidental o intencional. Incluso cuando se administran los antídotos habituales, entre el 10% y el 20% de los intoxicados mueren. Los estudios de investigación en animales ha indicado que el uso de bicarbonato de sodio o productos químicos similares que hacen que la sangre sea alcalina podría salvar a las personas intoxicadas con PO.
Los autores de la revisión buscaron estudios en los que se administraron dichas sustancias químicas a pacientes intoxicados con PO, para ver la eficacia del tratamiento. Se buscaron ensayos controlados aleatorizados, un tipo de estudio de investigación en el que un grupo de pacientes recibe un tratamiento, mientras que un grupo similar (el grupo control) recibe un tratamiento diferente.
Los autores encontraron ocho estudios, pero sólo dos pequeños ensayos controlados aleatorizados, uno de los cuales utilizó una dosis mayor de bicarbonato de sodio y el otro una dosis menor. Sólo el ensayo que utilizó dosis más altas de bicarbonato de sodio, que incluyó a 53 participantes, mostró un ligero beneficio del uso del bicarbonato de sodio junto con el tratamiento estándar para la intoxicación con PO. Este estudio no proporciona suficiente evidencia para recomendar el uso clínico habitual del bicarbonato de sodio. Hay cientos de tipos diferentes de PO, por lo que el tratamiento puede variar en función del tipo de intoxicación, así como de la gravedad de la misma. Es necesario investigar más para determinar el mejor tratamiento para la intoxicación con PO en diversas situaciones.
Los estudios preliminares indican un efecto beneficioso de la alcalinización de la sangre con NaHCO3 en la intoxicación con PO, pero no hay evidencia suficiente para apoyar su uso clínico habitual. Es necesario seguir investigando para determinar el método de alcalinización que optimizará los desenlaces y el régimen que producirá el pH arterial objetivo de 7,50 (rango: 7,45 a 7,55). Esto debería ir seguido de un ensayo controlado aleatorizado bien diseñado para determinar la eficacia.
La intoxicación con plaguicidas organofosforados (PO) es una causa importante de morbilidad y mortalidad en todo el mundo, especialmente en los países en vías de desarrollo. La mortalidad por autointoxicación intencional se sitúa entre el 10% y el 20%, incluso cuando se utilizan los antídotos habituales (atropina, oximas y benzodiacepinas). Se han probado tratamientos alternativos para intentar mejorar los desenlaces de la intoxicación aguda con PO, uno de los cuales es la alcalinización de la sangre. Las investigaciones en animales y en humanos han indicado que la alcalinización de la sangre con bicarbonato de sodio (NaHCO3) es beneficiosa para el tratamiento de la intoxicación aguda con PO.
Determinar la eficacia de la alcalinización, en particular con NaHCO3, para el tratamiento de la intoxicación aguda con PO.
Se hicieron búsquedas en el Registro Cochrane central de ensayos controlados (Cochrane Central Register of Controlled Trials) (La Biblioteca Cochrane 2010, número 4), MEDLINE, EMBASE, ISI Web of Science: Science Citation Index Expanded (SCI-EXPANDED) e ISI Web of Science: Conference Proceedings Citation Index- Science (CPCI-S), LILACS, Current Awareness in Clinical Toxicology e Internet mediante Google. También se realizó una búsqueda de citas y se revisaron manualmente las bibliografías de los artículos identificados. Las búsquedas se realizaron por última vez en octubre de 2010.
Ensayos controlados aleatorizados de pacientes sintomáticos tras una intoxicación aguda con PO tratados con alcalinización. La calidad de los estudios y la elegibilidad para su inclusión se evaluaron mediante los criterios de la herramienta de riesgo de sesgo de la Colaboración Cochrane.
Se identificaron los estudios y ambos autores extrajeron de forma independiente los datos que se registraron en un formulario prediseñado. Se registró el diseño del estudio, incluido el método de asignación al azar, las características de los participantes, el tipo de intervención y los desenlaces. Se determinó el riesgo relativo (RR) de muerte y la diferencia de medias ponderada (DMP) de la dosis total de atropina.
Se localizaron dos pequeños ensayos controlados aleatorizados, uno con dosis más altas de NaHCO3 y asignación alternada, el otro con dosis más bajas de NaHCO3 se presentó sólo en forma de resumen. En el estudio de dosis más altas, el RR de muerte en los pacientes que recibieron NaHCO3 en comparación con los controles fue 0,52 (IC del 95%: 0,05 a 5,39) y la DMP para la dosis total de atropina fue -36,1 (IC del 95%: -68,43 a -3,77). No se observaron efectos clínicos beneficiosos de las dosis más bajas de NaHCO3. Se identificaron otros seis estudios, pero ninguno cumplió los criterios de inclusión; tres estudios eran no controlados y tres eran controlados. En cada estudio se utilizó NaHCO3 para inducir la alcalinización. Se observó una marcada heterogeneidad entre los sujetos y los tratamientos, por ejemplo, distintos regímenes de NaHCO3.
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