Las intervenciones para prevenir los embarazos no deseados incluyen cualquier actividad (solo educación o asesoramiento en materia de salud, educación en materia de salud y desarrollo de aptitudes, educación en materia de salud y educación sobre anticonceptivos, educación y distribución de anticonceptivos, asesoramiento individual o grupo basados en la fe) destinada a aumentar los conocimientos y las actitudes de los adolescentes en relación con el riesgo de embarazos no deseados; promover el retraso en el inicio de las relaciones sexuales; fomentar el uso sistemático de métodos de control de la natalidad y reducir los embarazos no deseados.
Esta revisión incluyó 53 ensayos controlados aleatorizados que compararon estas intervenciones con varios grupos control (en su mayoría, educación sexual estándar habitual ofrecida por las escuelas). La búsqueda de ensayos no se limitó por país, aunque la mayoría de los ensayos incluidos se realizaron en países de altos ingresos; solo cuatro ensayos se realizaron en países de ingresos medios y bajos y representaron principalmente a los grupos socioeconómicos más bajos. Las intervenciones se administraron en escuelas, centros comunitarios, establecimientos de asistencia sanitaria y domicilios. Se realizó un metanálisis para los estudios en los que fue posible extraer los datos.
Se observó que solo las intervenciones que incluyeron una combinación de educación y promoción de la anticoncepción (intervenciones múltiples) redujeron de manera significativa los embarazos no deseados en el período de seguimiento a medio y largo plazo. Los resultados para las medidas de resultado conductuales (secundarias) no fueron consistentes entre los ensayos.
Las limitaciones de esta revisión incluyen que dependen de la fiabilidad con la que las participantes del programa informen con exactitud sobre su comportamiento y de las deficiencias metodológicas de los ensayos.
La combinación de las intervenciones educacionales y anticonceptivas parece reducir el embarazo no deseado en las adolescentes. La evidencia sobre los efectos del programa en las medidas biológicas es limitada. La variabilidad en las poblaciones de estudio, las intervenciones y los resultados de los ensayos incluidos, así como la escasez de estudios que comparen diferentes intervenciones directamente, impiden establecer una conclusión definitiva con respecto a qué tipo de intervención es más efectiva
Los embarazos no deseados entre las adolescentes representan un importante problema de salud pública en los países de altos ingresos, así como en los de ingresos medios y bajos. Para abordar este problema se han utilizado numerosas estrategias de prevención en diferentes países del mundo como la educación sanitaria, el desarrollo de habilidades y la mejora de la accesibilidad a métodos anticonceptivos. Sin embargo, existe incertidumbre con respecto a los efectos de estas intervenciones, por lo que se necesita examinar su base de evidencia.
Evaluar los efectos de las intervenciones de prevención primaria (realizadas en la escuela, la comunidad/el domicilio, de carácter clínico y de carácter religioso) sobre los embarazos no deseados en adolescentes.
Se buscaron todos los estudios pertinentes, independientemente del idioma o el estado de publicación, hasta noviembre 2015. Se realizaron búsquedas en el registro de ensayos especializados del Grupo Cochrane de Regulación de la Fertilidad (Cochrane Fertility Regulation Group), en el Registro Cochrane Central de Ensayos Controlados (Cochrane Central Register of Controlled Trials) (CENTRAL) (The Cochrane Library 2015, Número 11), MEDLINE, EMBASE, LILACS, Social Science Citation Index y Science Citation Index, Dissertations Abstracts Online, The Gray Literature Network, HealthStar, PsycINFO, CINAHL y POPLINE y en las listas de referencias de los artículos.
Se incluyeron los ensayos controlados aleatorizados (ECA) y los ensayos controlados aleatorizados grupales que evaluaron alguna intervención destinada a mejorar el conocimiento y las actitudes en relación con el riesgo de embarazo no deseado, a promover el retraso en el comienzo de las relaciones sexuales y a estimular el uso constante de los métodos de regulación de la natalidad para reducir los embarazos no deseados en adolescentes de entre diez y 19 años de edad.
Dos autores de la revisión de forma independiente evaluaron la eligibilidad y el riesgo de sesgo de los ensayos y extrajeron los datos. Cuando fue apropiado, los resultados binarios se agruparon mediante un modelo de efectos aleatorios, con intervalos de confianza (IC) del 95%. Cuando fue apropiado, los datos se combinaron en metanálisis y la calidad de la evidencia se evaluó mediante los criterios GRADE.
Se incluyeron 53 ECA en los que participaron 105 368 adolescentes. Las participantes fueron de diversas etnias. Dieciocho estudios asignaron al azar a individuos, 32 fueron estudios aleatorizados grupales (escuelas [20], aulas [6], y comunidades/vecindarios [6]). Tres estudios fueron mixtos (asignaron al azar individuos y grupos). La duración del seguimiento varió de tres meses a siete años; la duración mayor de 12 meses fue la más frecuente. Cuatro ensayos se realizaron en países de ingresos bajos y medios, y el resto se realizó en países de ingresos altos.
Intervenciones múltiples
Los resultados mostraron que las intervenciones múltiples (combinación de intervenciones educativas y de promoción de la anticoncepción) redujeron significativamente el riesgo de embarazos no deseados entre las adolescentes (RR 0,66; IC del 95%: 0,50 a 0,87; cuatro ECA individuales, 1905 participantes, evidencia de calidad moderada. Sin embargo, esta reducción no fue estadísticamente significativa en los ECA grupales. La evidencia de los posibles efectos de las intervenciones sobre los resultados secundarios (comienzo de las relaciones sexuales, uso de métodos de regulación de la natalidad, aborto, parto, enfermedades de transmisión sexual) no es definitiva.
Los puntos fuertes de la metodología incluyeron un tamaño de las muestras relativamente grande y el control estadístico de las diferencias iniciales, mientras que las limitaciones incluyeron la falta de resultados biológicos, el posible sesgo de autoinforme, análisis que ignoraron la asignación al azar grupal y el uso de pruebas estadísticas diferentes para informar los resultados.
Intervenciones educativas
Fue poco probable que las intervenciones educativas retrasaran significativamente el inicio de las relaciones sexuales entre las adolescentes, en comparación con los controles (RR 0,95; IC del 95%: 0,71 a 1,27; dos estudios, 672 participantes, evidencia de calidad baja).
Las intervenciones educativas aumentaron significativamente el uso de preservativos informado en la última relación sexual en las adolescentes, en comparación con los controles que no recibieron la intervención (RR 1,18; IC del 95%: 1,06 a 1,32; dos estudios, 1431 participantes, evidencia de calidad moderada).
Sin embargo, no está claro si las intervenciones educativas tuvieron algún efecto sobre los embarazos no deseados, ya que ninguno de los estudios incluidos informó este resultado.
Intervenciones de promoción de la anticoncepción
En el caso de las adolescentes que recibieron intervenciones de promoción de la anticoncepción, hubo poca o ninguna diferencia en el riesgo de un primer embarazo no deseado, en comparación con los controles (RR 1,01; IC del 95%: 0,81 a 1,26; dos estudios, 3440 participantes, evidencia de calidad moderada).
El uso de anticonceptivos hormonales fue significativamente mayor en las adolescentes del grupo de intervención, en comparación con las del grupo de control (RR 2,22; IC del 95%: 1,07 a 4,62; dos estudios, 3091 participantes, evidencia de alta calidad)
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