En esta revisión, se evaluó la efectividad de las terapias psicológicas para los pacientes adultos con síndrome del colon irritable. Se revisaron los estudios que incluyeron la terapia cognitivo-conductual, la psicoterapia interpersonal y la terapia de relajación o el tratamiento del estrés. Aunque es difícil establecer conclusiones debido a las diferencias entre los estudios y a aspectos de la calidad, los resultados indican que la terapia cognitivo-conductual y la psicoterapia interpersonal pueden ser efectivas inmediatamente después de finalizar el tratamiento. No está claro si los efectos de estas terapias se mantienen posteriormente. Estos resultados se deben interpretar con precaución, ya que la calidad de los estudios fue subóptima. Los médicos deben ser conscientes de las limitaciones de estas terapias y deben elegir una terapia apropiada según las características individuales del paciente.
Las intervenciones psicológicas pueden ser algo superiores a las condiciones de atención habitual o control en lista de espera al final del tratamiento, aunque la importancia clínica de lo anterior es debatible. A excepción de un único estudio, estas terapias no son superiores al placebo y el mantenimiento de su efecto es dudoso. El metanálisis estuvo significativamente limitado por los problemas de validez, la heterogeneidad, el tamaño de muestra pequeño y la definición de los resultados. Las investigaciones futuras se deben adherir a las recomendaciones actuales para los ensayos de tratamiento del SCI y se deben centrar en los efectos a largo plazo del tratamiento.
No existe consenso sobre el tratamiento óptimo para el síndrome del colon irritable (SCI). Los tratamientos psicológicos se recomiendan cada vez más, pero su efectividad es incierta.
Evaluar la eficacia de las intervenciones psicológicas para el tratamiento del síndrome de colon irritable.
Entre los años 1966 y 2008, se realizó una búsqueda asistida por computadora de MEDLINE, Embase, PsychInfo, CINAHL, Web of Science, The Cochrane Library y Google Scholar. Se consultaron las bases de datos locales de Europa.
Ensayos aleatorizados que compararan intervenciones psicológicas únicas con atención habitual o intervenciones simuladas en pacientes de más de 16 años de edad. No se aplicó ningún criterio de idioma.
La búsqueda identificó 25 estudios que cumplieron con los criterios de inclusión. Para cada resultado, se calculó el riesgo relativo (RR), la diferencia de riesgo (RD), el número necesario a tratar (NNT) y la diferencia de medias estandarizada (DME), junto con los intervalos de confianza del 95%, mediante un modelo de efectos aleatorios.
Intervenciones psicológicas como grupo
La DME para la mejoría de la puntuación de los síntomas a los dos y tres meses fue 0,97 (IC del 95%: 0,29 a 1,65) y 0,62 (IC del 95%: 0,45 a 0,79) respectivamente comparada con la atención habitual. Versus placebo, las DME fueron 0,71 (IC del 95%: 0,08 a 1,33) y -0,17 (IC del 95%: -0,45 a 0,11) respectivamente. Para la mejoría del dolor abdominal, las DME a los dos y tres meses fueron 0,54 (IC del 95%: 0,10 a 0,98) y 0,26 (IC del 95%: -0,07 a -0,45) en comparación con la atención habitual. La DME del placebo a los tres meses fue 0,31 (IC del 95%: -0,16 a 0,79). Para la mejoría en la calidad de vida, la DME de la atención habitual a los dos y tres meses fue 0,47 (IC del 95%: 0,11 a 0,84) y 0,31 (IC del 95%: -0,16 a 0,77) respectivamente.
Terapia cognitivo-conductual
La DME para la mejoría de la puntuación de los síntomas a los dos y tres meses fue 0,75 (IC del 95%: 0,20 a 1,70) y 0,58 (IC del 95%: 0,36 a 0,79) respectivamente comparada con la atención habitual. Versus placebo, las DME fueron 0,68 (IC del 95%: -0,01 a 1,36) y -0,17 (IC del 95%: -0,45 a 0,11) respectivamente. Para la mejoría del dolor abdominal, las DME a los dos y tres meses fueron 0,45 (IC del 95%: 0,00 a 0,91) y 0,22 (IC del 95%: -0,04 a -0,49) en comparación con la atención habitual. Versus placebo la DME a los tres meses fue 0,33 (IC del 95%: -0,16 a 0,82). Para la mejoría en la calidad de vida, las DME a los dos y tres meses comparadas con la atención habitual fueron 0,44 (IC del 95%: 0,04 a 0,85) y 0,92 (IC del 95%: 0,07 a 1,77) respectivamente.
Psicoterapia interpersonal
El RR para el alivio adecuado de los síntomas fue 2,02 (IC del 95%: 1,13 a 3,62); la DR 0,30 (IC del 95%: 0,13 a 0,46) y el NNT 4, cuando se comparó con la atención habitual. La DME para la mejoría de la puntuación de los síntomas fue 0,35 (IC del 95%: -0,75 a 0,05) en comparación con la atención habitual.
Terapia de relajación/tratamiento del estrés
La DME en la mejoría de la puntuación de los síntomas a los dos meses fue 0,50 (IC del 95%: 0,02 a 0,98), en comparación con la atención habitual. La DME en la mejoría del dolor abdominal a los tres meses fue 0,02 (IC del 95%: -0,56 a 0,61), en comparación con la atención habitual.
Resultados a largo plazo
Hubo muy pocos resultados disponibles del seguimiento a largo plazo. No hubo evidencia convincente de que los efectos del tratamiento se mantuvieran después de finalizar cualquier forma de tratamiento.
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