Aripiprazol versus antipsicóticos típicos para la esquizofrenia

La esquizofrenia es una enfermedad mental grave que afecta principalmente a las personas en la edad adulta temprana. Los síntomas de la esquizofrenia son percepciones sin causa (alucinaciones), falsas creencias fijas (delirios) y/o apatía, enlentecimiento y menos movimiento o pensamiento. Los pacientes que padecen esta enfermedad suelen ser tratados con fármacos antipsicóticos, pero hay un número significativo de pacientes que reciben este tratamiento que no responden o desarrollan efectos adversos incómodos. El aripiprazol es un nuevo fármaco que actúa en el cerebro de manera diferente a otros antipsicóticos y puede beneficiar a los pacientes que hasta ahora han sido resistentes al tratamiento. Esta revisión compara el aripiprazol con los antiguos antipsicóticos "típicos".

Se analizaron los datos de nueve ensayos clínicos con un total de 3622 pacientes. En los ensayos de menos de 12 semanas que informaron sobre la mejora del bienestar general y el estado mental, no hubo diferencias estadísticamente significativas entre los antipsicóticos típicos y el aripiprazol. Sin embargo, al observar los efectos adversos, los pacientes que tomaban aripiprazol tenían menos probabilidades de sufrir efectos secundarios del movimiento, visión borrosa, altos niveles de la hormona prolactina o aumento de la frecuencia cardíaca. También era menos probable que estos pacientes retiraran su consentimiento para participar en el estudio en ensayos cortos (menos de 12 semanas) y más largos (más de 12 semanas). Por el contrario, los pacientes que tomaban los antipsicóticos típicos tenían una probabilidad significativamente menor de sentirse mareados o con náuseas. Todos estos ensayos eran bastante diferentes entre sí: tenían diferentes ámbitos, reclutaban diferentes grupos de pacientes, tenían una duración variable (de 24 horas a 52 semanas) y comparaban el aripiprazol con diferentes antipsicóticos de primera generación. Esto dificultó la comparación de los resultados de un ensayo a otro. Además, muchos de los datos no pudieron ser utilizados porque las mediciones no se dieron en su totalidad. Este fármaco parece prometedor, pero es necesario realizar más ensayos, en particular ensayos bien planificados a largo plazo.

(Resumen en términos sencillos preparado para esta revisión por Janey Antoniou de RETHINK, Reino Unido www.rethink.org).

Conclusiones de los autores: 

El aripiprazol no difiere mucho de los fármacos antipsicóticos típicos con respecto a la eficacia; sin embargo, presenta ventajas significativas en cuanto a la tolerabilidad. Se necesitan ensayos controlados aleatorizados pragmáticos a corto, medio y largo plazo, con un informe claro, para replicar y validar estos hallazgos y determinar la posición del aripiprazol en la práctica clínica diaria.

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Antecedentes: 

El aripiprazol es un fármaco antipsicótico relativamente nuevo, del que se dice que es el prototipo de una nueva tercera generación de antipsicóticos, los llamados estabilizadores del sistema de dopamina-serotonina. En esta revisión se analiza la diferencia en eficacia y tolerancia del aripiprazol con respecto a los antipsicóticos típicos.

Objetivos: 

Evaluar los efectos del aripiprazol comparado con otros antipsicóticos típicos en pacientes con esquizofrenia y psicosis similares a la esquizofrenia.

Métodos de búsqueda: 

Se buscó en el registro de ensayos del Grupo Cochrane de Esquizofrenia (Cochrane Schizophrenia Group) (noviembre de 2007), el cual se basa en búsquedas frecuentes de BIOSIS, CENTRAL, CINAHL, EMBASE, MEDLINE y PsycINFO. Se examinaron las referencias de todos los estudios identificados en busca de ensayos adicionales. Se estableció contacto con las compañías farmacéuticas pertinentes, las agencias que aprueban los fármacos y los autores de los ensayos para obtener información adicional.

Criterios de selección: 

Se incluyeron todos los ensayos aleatorizados que comparaban el aripiprazol con los antipsicóticos típicos en pacientes con esquizofrenia o psicosis similares a la esquizofrenia.

Obtención y análisis de los datos: 

Los datos se extrajeron de forma independiente. Para los datos dicotómicos, se calcularon los riesgos relativos (RR) y sus intervalos de confianza (IC) del 95% sobre la base de un análisis del tipo intención de tratar (intention-to-treat analysis), basado en un modelo de efectos aleatorios. Se calcularon los números necesarios a tratar/para dañar (NNT/NND) cuando fue apropiado. Para los datos continuos, se calcularon las diferencias de medias ponderadas (DMP), nuevamente en base a un modelo de efectos aleatorios. Se estableció contacto con los representantes de Bristol Myers Squibb pharmaceuticals (RU) en busca de datos adicionales.

Resultados principales: 

Se incluyeron nueve ensayos aleatorizados que incluyeron a 3122 pacientes y compararon el aripiprazol con fármacos antipsicóticos típicos. Ningún estudio informó recaída, el resultado primario de interés de esta revisión. La deserción fue alta en los estudios y el informe de los datos fue deficiente. Los participantes que recibieron aripiprazol fueron comparables a los que recibieron fármacos típicos en cuanto a la mejoría del estado global y el estado mental. El aripiprazol proporcionó un beneficio significativo sobre los antipsicóticos típicos en cuanto a una menor ocurrencia de síntomas extrapiramidales (n = 968, tres ECA; RR 0,46; IC: 0,3 a 0,9; NNT 13; IC: 17 a 10), y particularmente sobre la acatisia (n =897, tres ECA; RR 0,39; IC: 0,3 a 0,6; NNT 11; IC: 14 a 9). Un número menor de pacientes del grupo que recibió aripiprazol presentó hiperprolactinemia (n = 300; un ECA; RR 0,07; IC: 0,03 a 0,2; NNT 2; IC: 3 a 1). El aripiprazol presentaba un menor riesgo de taquicardia sinusal (n = 289, un ECA, RR 0,09; IC: 0,01 a 0,8; NNT 22; IC: 63 a 13) y de visión borrosa (n = 308, un ECA, RR 0,19; IC: 0,1 a 0.7, NNT 14 CI 25 a 10); pero mayor riesgo de aparición de mareos (n = 957, tres ECA, RR 1,88 CI 1,1 a 3,2, NND 20 CI 33 a 14) y náuseas (n = 957, tres ECA, RR 3,03 CI 1,5 a 6,1, NND 17 CI 25 a 13). Las tasas de deserción fueron altas en ambos grupos, aunque significativamente más participantes del grupo aripiprazol completaron el estudio a largo plazo (n = 1294, un ECA; RR 0,81; IC: 0,8 a 0,9; NNT 8; IC: 5 a 14).

Notas de traducción: 

La traducción y edición de las revisiones Cochrane han sido realizadas bajo la responsabilidad del Centro Cochrane Iberoamericano, gracias a la suscripción efectuada por el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad del Gobierno español. Si detecta algún problema con la traducción, por favor, contacte con Infoglobal Suport, cochrane@infoglobal-suport.com.

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