El trabajo de parto antes de término durante el embarazo puede provocar el nacimiento prematuro del lactante. El trabajo de parto prematuro se define como contracciones uterinas frecuentes (al menos cuatro en 20 minutos u ocho en 60 minutos) y cambios progresivos en el cuello uterino. Si el trabajo de parto prematuro no recibe un tratamiento adecuado, puede presentarse el trabajo de parto activo, lo que provoca un parto prematuro antes de que se complete la semana de gestación 37. El parto prematuro es la principal causa de bajo peso al nacer, enfermedad y mortalidad entre los recién nacidos. Existen sustancias denominadas prostaglandinas que cumplen una función importante en la contracción del músculo del útero y son importantes durante el trabajo de parto y el nacimiento. Son producidas por la ciclooxigenasa (COX), una enzima que aumenta el nivel de prostaglandinas. La administración de inhibidores de la COX a embarazadas con riesgo de trabajo de parto prematuro puede detener las contracciones del útero y permitir que lleven el embarazo a término. Se incluyó un ensayo aleatorio pequeño (con 98 pacientes) que incluyó el rofecoxib (un tipo de inhibidor de la COX). El estudio incluido no aportó información acerca del trabajo de parto antes del embarazo a término. Sin embargo, la administración de este inhibidor de la COX se asoció con un aumento del riesgo de nacimientos antes del término. Los datos hallados fueron insuficientes para realizar recomendaciones sobre la administración de inhibidores de la COX para prevenir el trabajo de parto prematuro. Las futuras investigaciones deberán incluir el seguimiento de los neonatos para evaluar los efectos a corto y largo plazo asociados con la administración de inhibidores de la COX durante el embarazo.
Las pruebas sobre la administración de inhibidores de la COX para prevenir el trabajo de parto prematuro son escasas. Los datos disponibles no son adecuados para realizar recomendaciones acerca de la administración de inhibidores de la COX en la práctica para prevenir el trabajo de parto prematuro. Las futuras investigaciones deberán incluir el seguimiento de neonatos para evaluar los efectos a corto y largo plazo de los inhibidores de la COX.
La prevención del trabajo de parto prematuro es el paso más importante en la prevención del parto prematuro. Las prostaglandinas cumplen una función importante en el trabajo de parto y en el nacimiento. La producción de prostaglandinas puede bloquearse mediante la inhibición de la enzima ciclooxigenasa (COX), y esto puede detener las contracciones uterinas. Una revisión Cochrane sobre los inhibidores de la COX para tratar el trabajo de parto prematuro no halló suficientes datos para establecer conclusiones acerca de su efectividad.
Evaluar la efectividad y la seguridad de los inhibidores de la COX para prevenir el trabajo de parto prematuro en pacientes de alto riesgo.
Se hicieron búsquedas en el registro de ensayos del Grupo Cochrane de Embarazo y Parto (Cochrane Pregnancy and Childbirth Group) (30 junio 2012).
Todos los ensayos aleatorios publicados y no publicados que evaluaran la administración de un inhibidor de la COX para prevenir el trabajo de parto prematuro en embarazadas con una edad gestacional menor de 36 semanas con riesgo de parto prematuro, pero que no lo estuvieran sufriendo. Los ensayos asignados al azar por grupos fueron elegibles para la inclusión. Se excluyeron los estudios y ensayos cuasialeatorios con diseños cruzados.
Dos revisores (T Khanprakob y U Sangkomkamhang) evaluaron de forma independiente todos los estudios potenciales para su inclusión. Los desacuerdos se resolvieron por discusión y cuando fue necesario se consultó a un tercer revisor. Dos revisores evaluaron de forma independiente la calidad de los ensayos y extrajeron los datos. Se verificó la exactitud de los datos.
Se incluyó un ensayo aleatorio (con 98 pacientes) que evaluó la efectividad de un tipo de inhibidor de la COX (rofecoxib) para prevenir el parto prematuro. El estudio incluido no informó ningún dato acerca de uno de los resultados primarios de interés: el trabajo de parto prematuro. La administración de rofecoxib se asoció con un aumento del riesgo de parto prematuro y de rotura prematura de membranas antes de término (PPROM, por sus siglas en inglés). El rofecoxib se asoció con un mayor riesgo de oligohidramnios y baja producción de orina fetal, aunque los efectos fueron reversibles después de interrumpir el tratamiento. No hubo diferencias en el número de pacientes que interrumpieron el tratamiento antes de las 32 semanas de gestación. No hubo diferencias en las morbilidades neonatales ni en el ingreso a la unidad de cuidados intensivos neonatales. No hubo efectos adversos maternos ni mortalidad perinatal en ninguno de los grupos.
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