¿Qué es la colitis ulcerosa?
La colitis ulcerosa (CU) es una enfermedad intestinal inflamatoria crónica que se caracteriza por dolor abdominal, evacuaciones intestinales urgentes y diarrea sanguinolenta. El tratamiento de la CU se centra en la inducción de la remisión (tratamiento de los síntomas de la enfermedad activa) y en la prevención de la recurrencia clínica (reanudación de los síntomas de la enfermedad activa) en los pacientes en remisión (conocido como tratamiento de mantenimiento). La CU tiene una repercusión importante en la calidad de vida relacionada con la salud (CdVRS) del paciente. La CdVRS se refiere al funcionamiento físico, el bienestar social y emocional, la capacidad de trabajar y la ausencia de síntomas de enfermedad de la persona. La CdVRS es significativamente baja en los pacientes con CU en comparación con la población general. Los ensayos controlados aleatorios (ECA) que evalúan las intervenciones médicas para la CU tradicionalmente han utilizado los índices de actividad clínica de la enfermedad, que se centran en síntomas subjetivos para definir resultados primarios como la remisión o la mejoría clínicas. Este énfasis en los síntomas de la enfermedad da lugar a que no se evalúen otros indicadores importantes del éxito del tratamiento como la CdVRS.
¿Qué son las intervenciones biológicas para la colitis ulcerosa?
Los productos biológicos son fármacos genéticamente diseñados hechos a partir de organismos vivos. Funcionan al tener como objetivo células específicas en los intestinos que participan en el proceso de la inflamación.
¿Qué examinaron los investigadores?
Los investigadores evaluaron la repercusión de los fármacos biológicos (p.ej. interferón-ß-1a, rituximab, infliximab, adalimumab, golimumab y vedolizumab) en la CdVRS de los pacientes con colitis ulcerosa. Los investigadores buscaron exhaustivamente en la bibliografía médica hasta el 9 de setiembre de 2015.
¿Qué encontraron los investigadores?
Los investigadores identificaron nueve ECA que incluyeron 4143 pacientes con colitis ulcerosa. Un estudio pequeño investigó rituximab, un estudio investigó interferón-ß-1a, un estudio investigó vedolizumab y los estudios restantes investigaron antagonistas del factor alfa de necrosis tumoral (TNF-α) que incluyen infliximab (dos estudios), adalimumab (tres estudios), y golimumab (un estudio). Todos los estudios compararon la medicación biológica con placebo (una medicina falsa) administrados por infusión intravenosa (una bolsa IV) o inyección subcutánea (una inyección aplicada en la capa de grasa entre la piel y el músculo). Ocho de los estudios se calificaron de alta calidad y el estudio de rituximab se consideró de calidad deficiente debido a una alta tasa de abandonos. El estudio que comparó interferón-ß-1a con placebo no encontró pruebas claras de una diferencia en la proporción de pacientes que experimentaron mejoría en la CdVRS a las ocho semanas. El estudio que comparó rituximab con placebo no encontró pruebas claras de una diferencia en la CdVRS a las 12 semanas. Pruebas de calidad moderada del estudio que comparó vedolizumab con placebo indican que vedolizumab proporciona una mejoría clínicamente significativa en la CdVRS en los pacientes con CU que reciben tratamiento de mantenimiento. Una mejoría clínicamente significativa sería una diferencia en la CdVRS que puede ser detectada por el paciente con colitis ulcerosa. Las pruebas de calidad moderada de los estudios que compararon adalimumab con placebo indican que adalimumab puede proporcionar un efecto beneficioso con respecto a la mejoría en la CdVRS de los pacientes con CU que reciben tratamiento de inducción o de mantenimiento. Sin embargo, las diferencias entre adalimumab y placebo pueden no ser clínicamente significativas. Pruebas de alta calidad de un estudio que comparó golimumab con placebo indican que los pacientes que recibieron golimumab tuvieron mejor CdVRS a las seis semanas que los pacientes que recibieron placebo. Sin embargo, esta diferencia en la CdVRS puede no ser clínicamente significativa. Pruebas de alta calidad indican que infliximab proporciona una mejoría clínicamente significativa en la CdVRS en los pacientes con CU que reciben tratamiento de inducción. Pruebas de alta calidad muestran que los antagonistas del TNF-α (como una clase de productos biológicos) proporcionan una mejoría clínicamente significativa en la CdVRS en los pacientes con CU que reciben tratamiento de inducción. Se necesitan más estudios de investigación para evaluar el efecto a largo plazo del tratamiento biológico en la CdVRS en los pacientes con CU. Los estudios de investigación futuros también se deben centrar en determinar si golimumab y adalimumab pueden proporcionar a los pacientes con CU una mejoría clínicamente significativa en la CdVRS. Los estudios de investigación futuros deben incluir comparaciones directas de los productos biológicos para determinar qué productos biológicos proporcionan el mayor efecto beneficioso con respecto a la CdVRS.
Estos resultados indican que los productos biológicos tienen la posibilidad de mejorar la CdVRS en los pacientes con CU. Pruebas de alta calidad indican que infliximab proporciona una mejoría clínicamente significativa en la CdVRS en los pacientes con CU que reciben tratamiento de inducción. Pruebas de calidad moderada indican que vedolizumab proporciona una mejoría clínicamente significativa en la CdVRS en los pacientes con CU que reciben tratamiento de mantenimiento. Estos resultados son importantes ya que hay escasez de fármacos eficaces para el tratamiento de la CU que tenga la posibilidad de reducir la actividad de la enfermedad y mejorar la CdVRS. Se necesitan más estudios de investigación para evaluar el efecto a largo plazo del tratamiento biológico en la CdVRS en los pacientes con CU. Se necesitan más estudios de investigación para evaluar la repercusión de golimumab y adalimumab en la CdVRS de los pacientes con CU. Los ensayos que incluyen comparaciones directas de productos biológicos ayudarían a determinar qué productos biológicos proporcionan efectos beneficiosos óptimos para la CdVRS.
La colitis ulcerosa (CU) es un trastorno inflamatorio crónico del colon que tiene un curso recurrente remitente. La calidad de vida relacionada con la salud (CdVRS) es significativamente inferior en los pacientes con CU que en la población general debido a los efectos negativos de la enfermedad sobre el bienestar físico, psicológico y social. Los ensayos controlados aleatorios (ECA) que evalúan las intervenciones médicas para la CU tradicionalmente han utilizado los índices de actividad clínica de la enfermedad, que se centran en los síntomas para definir resultados primarios como la remisión o la mejoría clínicas. Sin embargo, este enfoque no evalúa efectos beneficiosos que son muy relevantes para los pacientes, como la CdVRS
El objetivo primario fue evaluar la repercusión del tratamiento biológico en la CdVRS de los pacientes con CU.
Se hicieron búsquedas en PubMed, MEDLINE, EMBASE y en CENTRAL, desde su inicio hasta septiembre 2015. También se hicieron búsquedas en actas de congresos y listas de referencias.
Se incluyeron los ECA que compararon productos biológicos con placebo en pacientes con CU e informaron la CdVRS mediante el Inflammatory Bowel Disease Questionnaire (IBDQ), o el SF-36 o EQ-5D para medir la CdVRS.
Dos autores de la revisión examinaron de forma independiente los estudios para la inclusión, extrajeron los datos y evaluaron la calidad de los estudios mediante la herramienta Cochrane riesgo de sesgo. El resultado primario fue la mejoría en la CdVRS. Para los resultados dicotómicos se calculó el cociente de riesgos (CR) y el intervalo de confianza (IC) del 95%. Para los datos continuos, se calculó la diferencia de medias (DM) y el IC del 95%. La calidad general de las pruebas que apoyan el resultado primario se evaluó mediante los criterios GRADE.
Se incluyeron nueve ECA (n= 4143). Los productos biológicos incluyeron rituximab (un estudio pequeño), interferón-ß-1a (un estudio), vedolizumab (un estudio) y los antagonistas del factor alfa de necrosis tumoral (TNF-α) infliximab (dos estudios), adalimumab (tres estudios) y golimumab (un estudio). El riesgo de sesgo fue bajo en ocho estudios. El estudio de rituximab se consideró de alto riesgo de sesgo debido al sesgo de desgaste. Los estudios que compararon interferón-ß-1a y rituximab con placebo no encontraron pruebas claras de una diferencia en la proporción de pacientes que experimentaron una mejoría en la CdVRS a las ocho o 12 semanas respectivamente. La proporción de pacientes con una mejoría clínicamente significativa en la CdVRS a las seis o 52 semanas fue significativamente mayor en los pacientes que recibieron vedolizumab en comparación con placebo. A las seis semanas el 37% (83/225) de los pacientes con vedolizumab tuvieron una mejoría en la puntuación del IBDQ de al menos 16 puntos a partir del valor inicial en comparación con el 23% (34/149) de los pacientes que recibieron placebo (CR 1,62; IC del 95%: 1,15 a 2,27; un estudio). A las 52 semanas, el 64% (157/247) de los pacientes con vedolizumab tuvieron una mejoría en la puntuación del IBDQ de al menos 16 puntos a partir del valor inicial en comparación con el 38% (48/126) de los pacientes que recibieron placebo (CR 1,62; IC del 95%: 1,15 a 2,27; un estudio). Un análisis GRADE indicó que la calidad general de las pruebas que apoyaron este resultado fue moderada debido a los datos escasos (< 400 eventos). Los pacientes que recibieron vedolizumab de mantenimiento cada ocho semanas tuvieron puntuaciones medias del 36-SF significativamente mayores que los pacientes que recibieron placebo a las 52 semanas (DM 3,40; IC del 95%: 1,56 a 5,24; un estudio 248 pacientes). Esta diferencia parece ser clínicamente significativa ya que el límite inferior para un cambio clínicamente significativo en el SF-36 es de 3 puntos. Un análisis GRADE indicó que la calidad general de las pruebas que apoyaron este resultado fue moderada debido a los datos escasos (< 400 eventos). Los pacientes que recibieron adalimumab tuvieron puntuaciones medias del IBDQ significativamente mayores que los pacientes que recibieron placebo a las ocho semanas (DM 9,00; IC del 95%: 2,65 a 15,35; un estudio, 494 pacientes) y a las 52 semanas (DM 8,00; IC del 95%: 0,68 a 15,32; un estudio, 494 pacientes). Sin embargo, estas diferencias pueden no ser clínicamente significativas ya que el límite inferior para un cambio clínicamente significativo en el IBDQ es de 16 puntos. Un análisis GRADE indicó que la calidad general de las pruebas que apoyaron este resultado fue moderada debido a los datos escasos (< 400 eventos). Los pacientes que recibieron golimumab a dosis de 200/100 mg (DM 12,20; IC del 95%: 6,52 a 17,88; 504 pacientes) o 400/200 mg (DM 12,10; IC del 95%: 6,40 a 17,80; 508 pacientes) tuvieron puntuaciones medias del IBDQ significativamente mayores que los pacientes que recibieron placebo a las seis semanas. Aunque un análisis GRADE indicó que la calidad general de las pruebas que apoyaron estos resultados fue alta, la diferencia en las puntuaciones del IBDQ puede no ser clínicamente significativa. Los pacientes que recibieron infliximab tuvieron puntuaciones medias del IBDQ significativamente mayores a las seis u ocho semanas que los pacientes que recibieron placebo (DM 18,58; IC del 95%: 13,19 a 23,97; dos estudios, 529 pacientes). Esta diferencia en la CdVRS es clínicamente significativa. Un análisis GRADE indicó que la calidad general de las pruebas que apoyaron este resultado fue alta. La proporción de pacientes con una mejoría clínicamente significativa en la CdVRS a las ocho semanas fue significativamente mayor en los pacientes con infliximab en comparación con placebo. El 69% (333/484) de los pacientes con infliximab tuvo una mejoría en la puntuación del IBDQ de > 16 puntos a partir del valor inicial en comparación con el 50% de los pacientes que recibieron placebo (CR 1,39; IC del 95%: 1,21 a 1,60; un estudio). Un análisis GRADE indicó que la calidad general de las pruebas que apoyaron este resultado fue alta. Se encontraron resultados similares entre infliximab y placebo cuando la CdVRS se midió mediante el instrumento SF 36. Un estudio pequeño (n = 43) no encontró diferencias en la CdVRS entre infliximab y placebo cuando se midió con el EQ-5D. Los análisis agrupados de los antagonistas del TNF-α mostraron un efecto beneficioso en la CdVRS que favoreció al TNF-α sobre placebo.