Antecedentes
La rehabilitación ayuda a la recuperación tras un ictus y otras lesiones cerebrales no progresivas mediante tratamiento. Sin embargo, fuera de las horas de tratamiento, las personas podrían tener muy pocos recursos para mantenerse estimuladas. El enriquecimiento ambiental es un concepto relativamente nuevo en la rehabilitación, en el que el propio entorno se diseña para que sea atractivo e incluya actividades físicas, cognitivas y sociales, como ejercicios y juegos. Por ejemplo, una unidad de recién nacidos podría ser interesante y estimulante, pero un ambiente hospitalario para adultos generalmente no lo es. El diseño del entorno por sí solo debería fomentar (pero no forzar) las actividades sin necesidad de una rehabilitación especializada adicional.
Pregunta de la revisión
Se quería averiguar si el tratamiento con enriquecimiento ambiental es mejor o peor que las alternativas.
Fecha de la búsqueda
Las evidencias están vigentes hasta el 26 de octubre de 2020.
Características de los estudios
Población: se planificó incluir estudios en los que los participantes fueran adultos que hubieran sufrido un ictus o una lesión cerebral no progresiva (como traumatismo craneoencefálico pero no demencia, enfermedad de Alzheimer o esclerosis múltiple).
Intervención: las intervenciones de enriquecimiento ambiental suelen incluir múltiples actividades, como ordenadores, juegos de ordenador, música y lectura.
Comparación: se planificó comparar las intervenciones ambientales con la atención habitual (fisioterapia regular, logopedia, terapia ocupacional) o un tratamiento alternativo.
Desenlaces: se dividieron los desenlaces en principales y secundarios. Los desenlaces principales se centraron en el bienestar psicológico (ansiedad, depresión, estrés) y el afrontamiento. Los desenlaces secundarios se centraron en la calidad de vida, la función física, la función comunicativa y cognitiva, y los niveles de actividad. También se planeó informar sobre los eventos adversos.
Resultados clave
Se encontró un ensayo que comparó la intervención ambiental sola con la atención habitual o un tratamiento alternativo. El ensayo incluyó a 53 participantes que habían sufrido un ictus y que se encontraban en la unidad de rehabilitación de un hospital. El ensayo comparó el enriquecimiento ambiental (que incluía actividades físicas, cognitivas y sociales como material de lectura, juegos de mesa y de cartas, juegos de ordenador, música, obras de arte y ordenador con Internet) con los servicios estándar. Los principales desenlaces estaban relacionados con el bienestar psicológico y el afrontamiento. No hay confianza en los resultados porque el ensayo fue muy pequeño y muy propenso al sesgo.
Conclusión
La falta de evidencias en la investigación actual no significa que el enriquecimiento ambiental sea ineficaz. Se necesitan más investigaciones con diseños de estudios sólidos y mediciones de desenlaces consistentes que evalúen la efectividad del enriquecimiento ambiental en diferentes ámbitos (dentro o fuera del hospital), qué componentes del enriquecimiento ambiental son efectivos, si el enriquecimiento ambiental es coste-efectivo y si es seguro para las personas después de un ictus u otras lesiones cerebrales no progresivas.
Sin embargo, la falta de evidencia en las investigaciones actuales no debe interpretarse como una prueba de que el enriquecimiento ambiental es ineficaz.
Es necesario realizar más investigaciones con diseños de estudios sólidos, como los ECA por conglomerados, y una medición de desenlaces consistente que evalúe la efectividad del enriquecimiento ambiental en diferentes ámbitos (hospitalario versus ambulatorio), la efectividad relativa de los diversos componentes del enriquecimiento ambiental, la coste-efectividad y la seguridad de la intervención en personas después de un accidente cerebrovascular u otras lesiones cerebrales no progresivas. Sin embargo, hay que tener en cuenta que es difícil realizar ensayos aleatorizados o a doble ciego sobre el enriquecimiento ambiental, dada la naturaleza de la intervención.
La rehabilitación es eficaz para la recuperación tras un accidente cerebrovascular y otras lesiones cerebrales no progresivas, pero no está claro si el propio entorno de rehabilitación, fuera de las horas terapéuticas limitadas, favorece al máximo la recuperación. El enriquecimiento ambiental es un concepto relativamente nuevo dentro de la rehabilitación para humanos. En esta revisión, se define como una intervención diseñada para facilitar la actividad física (motora y sensorial), cognitiva y social mediante el suministro de equipos y la organización de un entorno estructurado y estimulante. El entorno debe estar diseñado para fomentar (pero no forzar) las actividades sin necesidad de un aporte de material adicional de rehabilitación especializada.
Evaluar los efectos del enriquecimiento ambiental en el bienestar, la recuperación funcional, los niveles de actividad y la calidad de vida de las personas que sufren un accidente cerebrovascular o una lesión cerebral no progresiva.
Se realizó la búsqueda el 26 de octubre de 2020. Se realizaron búsquedas en el Registro Cochrane central de ensayos controlados (Cochrane Central Register of Controlled Trials, CENTRAL) en la Biblioteca Cochrane; en MEDLINE (desde 1950); en Embase (desde 1980); en el Cumulative Index to Nursing and Allied Health Literature (CINAHL; desde 1982); en la Allied and Complementary Medicine Database (AMED; desde 1985); en PsycINFO (desde 1806); en la Physiotherapy Evidence Database (PEDro; desde 1999); y en 10 bases de datos bibliográficas adicionales y registros de ensayos en curso.
Se planificó incluir ensayos controlados aleatorizados (ECA) que compararan el enriquecimiento ambiental con los servicios estándar.
Dos autores de la revisión evaluaron de forma independiente los estudios elegibles, extrajeron los datos y evaluaron la calidad de los estudios. Los desacuerdos se resolvieron mediante debate con un tercer autor de la revisión. Se determinó el riesgo de sesgo para cada estudio y se realizó una síntesis de la "mejor evidencia" utilizando el método GRADE.
Se identificó un ECA, con 53 participantes con accidente cerebrovascular, que comparaba el enriquecimiento ambiental (que incluía actividades físicas, cognitivas y sociales como material de lectura, juegos de mesa y de cartas, tecnología de juegos, música, obras de arte y ordenador con Internet) con los servicios estándar en un ámbito de rehabilitación de pacientes hospitalizados. Se excluyeron cinco estudios, se encontraron dos estudios pendientes de clasificación y un estudio en curso que describía el enriquecimiento ambiental en sus intervenciones. De los estudios excluidos, tres no eran ECA y dos describían cointervenciones con un componente significativo de rehabilitación. De acuerdo con el único ECA pequeño incluido con alto riesgo de sesgo, los datos son insuficientes para proporcionar cualquier indicación fiable de beneficio o riesgo para guiar la práctica clínica en cuanto a la provisión de enriquecimiento ambiental.
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