Pregunta de la revisión
Se revisaron las pruebas de los efectos beneficiosos y perjudiciales de los antibióticos sistémicos (administrados por vía oral) o tópicos (administrados por la nariz) en pacientes con rinosinusitis crónica.
Antecedentes
La rinosinusitis crónica es una afección frecuente que se define como inflamación de la nariz y los senos paranasales (un grupo de espacios llenos de aire detrás de la nariz, los ojos y las mejillas). Los pacientes presentaron al menos dos o más de los síntomas siguientes por al menos 12 semanas: obstrucción nasal, secreción por la nariz o rinorrea, dolor o presión en la cara o disminución del sentido del olfato (hiposmia). Algunos pacientes también presentan pólipos nasales, que son tumefacciones en forma de uva del recubrimiento nasal normal dentro de la vía nasal y los senos.
Características de los estudios
Se incluyeron cinco ensayos controlados aleatorios (ECA) con un total de 293 participantes. Los estudios fueron pequeños (43 a 79 participantes). Cuatro reclutaron adultos y el quinto, niños. Tres estudios solamente incluyeron pacientes con rinosinusitis crónica sin pólipos nasales, uno una mezcla de pacientes con y sin pólipos y el estudio restante solamente a pacientes con pólipos. Todos utilizaron diferentes tipos de antibióticos por vía oral; ninguno analizó antibióticos tópicos. Los antibióticos se administraron a los pacientes como agentes antimicrobianos o antiinflamatorios y por períodos de tiempo diferentes, aunque en todos los casos fue posible analizar los resultados después de tres meses. Los antibióticos se compararon con placebo, con esteroides intranasales (en la nariz) o con esteroides orales. Un estudio administró antibióticos como un tratamiento adicional además de irrigación salina nasal, y en este estudio la mayoría de los pacientes también recibieron esteroides intranasales.
Resultados clave y calidad de las pruebas
En comparación con placebo (tres estudios), hubo pruebas de calidad moderada en un estudio de que puede haber una mejoría en la calidad de vida relacionada con la salud (CdVRS) específica de la enfermedad con los antibióticos orales en los pacientes con rinosinusitis crónica (sin pólipos) al final del tratamiento (tres meses), pero no está claro si la mejoría en la CdVRS persistirá tres meses después. Puede haber un aumento de los trastornos gastrointestinales y la reacción alérgica presunta (erupción o irritación en la piel) con los antibióticos, pero no hay mucha seguridad y la calidad de las pruebas es muy baja.
Los antibióticos se administraron junto con irrigación salina nasal y esteroides intranasales (en comparación con placebo más lo mismo) en un estudio. No está claro si hubo una diferencia importante en la CdVRS específica de la enfermedad después del tratamiento (tres meses) o tres meses después que se terminó el tratamiento (pruebas de baja calidad). Puede haber habido más pacientes del grupo de antibióticos que sintieran que "mejoraron" al final del tratamiento, pero también hubo pacientes que tuvieron síntomas peores en ambos grupos (pruebas de muy baja calidad). No está claro si hubo una diferencia en los trastornos gastrointestinales entre los grupos.
En comparación con los esteroides intranasales en los pacientes con rinosinusitis crónica (sin pólipos), no está claro si hubo una diferencia en la gravedad de la enfermedad (con el uso de una puntuación combinada para cuatro síntomas diferentes) entre los grupos de antibióticos y esteroides intranasales en un estudio (pruebas de baja calidad). No se proporcionó información acerca de los eventos adversos.
El único estudio que comparó antibióticos con esteroides orales (en pacientes con rinosinusitis crónica con pólipos) no presentó resultados de efectividad que se pudieran utilizar. No está claro si hubo diferencias en los trastornos gastrointestinales o la irritación cutánea en el grupo de antibióticos (pruebas de muy baja calidad).
No hubo informes de ningún efecto adverso grave en ninguno de los estudios.
Conclusiones
Se encontraron muy pocas pruebas de que los antibióticos orales son eficaces en los pacientes con rinosinusitis crónica. Se encontraron pruebas de calidad moderada de una mejoría moderada en la calidad de vida específica de la enfermedad en los adultos con rinosinusitis crónica sin pólipos que recibieron tres meses de un antibiótico macrólido. El tamaño de la mejoría fue moderado (0,5 puntos en una escala de 5 puntos) y solo se observó al final del tratamiento de tres meses; tres meses después no se encontraron diferencias.
A pesar de la opinión general de que los antibióticos se pueden asociar con efectos adversos, que incluyen trastornos gastrointestinales, los resultados en esta revisión no estuvieron claros porque los estudios fueron pequeños y se informaron pocos eventos.
Se requieren más estudios de investigación en esta área, que evalúen particularmente los resultados y los efectos adversos a más largo plazo.
Se encontraron muy pocas pruebas de que los antibióticos sistémicos son eficaces en los pacientes con rinosinusitis crónica. Se encontraron pruebas de calidad moderada de una mejoría moderada en la calidad de vida específica de la enfermedad en los adultos con rinosinusitis crónica sin pólipos que recibieron tres meses de un antibiótico macrólido. El tamaño de la mejoría fue moderada (0,5 puntos en una escala de 5 puntos) y solo se observó al final del tratamiento de tres meses; tres meses después no se encontraron diferencias.
A pesar de la opinión general de que los antibióticos se pueden asociar con efectos adversos, que incluyen trastornos gastrointestinales, los resultados en esta revisión no estuvieron claros porque los estudios fueron pequeños y se informaron pocos eventos.
Ningún ECA de antibióticos tópicos cumplió con los criterios de inclusión.
Se requieren más estudios de investigación en esta área, que evalúen particularmente los resultados y los efectos adversos a más largo plazo.
Esta revisión es una de seis que examinan las opciones primarias de tratamiento médico para los pacientes con rinosinusitis crónica.
La rinosinusitis crónica es frecuente y se caracteriza por la inflamación del recubrimiento de la nariz y los senos paranasales que da lugar a bloqueo nasal, secreción nasal, presión / dolor facial y pérdida del sentido del olfato. La enfermedad se puede presentar con o sin pólipos nasales. Los antibióticos sistémicos y tópicos se administran con la intención de eliminar la infección a corto plazo (y en parte para reducir la inflamación a largo plazo), para normalizar el moco nasal y mejorar los síntomas.
Evaluar los efectos de los antibióticos sistémicos y tópicos en los pacientes con rinosinusitis crónica.
El Especialista en Información del Grupo Cochrane de Enfermedades de Oído, Nariz y Garganta (Cochrane Ear, Nose and Throat Disorders [ENT] Group) buscó en el Registro de Ensayos del Grupo Cochrane ENT; CENTRAL (2015, número 8); MEDLINE; EMBASE; ClinicalTrials.gov; ICTRP y fuentes adicionales de ensayos publicados y no publicados. La fecha de la búsqueda fue 29 septiembre 2015.
Ensayos controlados aleatorios (ECA) con un período de seguimiento de al menos tres meses que compararon tratamiento con antibióticos sistémicos o tópicos con (a) placebo o (b) ningún tratamiento o (c) otras intervenciones farmacológicas.
Se utilizaron los procedimientos metodológicos estándar previstos por Cochrane. Los resultados primarios fueron la calidad de vida relacionada con la salud (CdVRS) específica de la enfermedad, la gravedad de la enfermedad informada por el paciente y el evento adverso más frecuente, trastornos gastrointestinales. Los resultados secundarios incluyeron la CdVRS general, la puntuación endoscópica de los pólipos nasales, la puntuación en el examen por tomografía computarizada (TC) y los eventos adversos por reacción alérgica presunta (erupción o irritación cutánea) y anafilaxia u otras reacciones muy graves. Se utilizó GRADE para evaluar la calidad de las pruebas para cada resultado; esto se indica en cursiva.
Se incluyeron cinco ECA (293 participantes), todos los cuales compararon antibióticos sistémicos con placebo u otra intervención farmacológica.
Las características variables de los estudios hicieron difícil la comparación. Cuatro estudios reclutaron sólo adultos y uno sólo niños. Tres administraron macrólidos, uno tetraciclina y uno un antibiótico tipo cefalosporina. Tres incorporaron solo a pacientes con pólipos nasales sin rinosinusitis crónica, uno reclutó a pacientes con pólipos nasales con rinosinusitis crónica y uno incluyó una población mixta. Tres siguieron a los pacientes por diez a 12 semanas después de finalizado el tratamiento.
Antibióticos sistémicos versus placebo
Tres estudios compararon antibióticos con placebo (176 participantes).
Un estudio (64 participantes, sin pólipos) informó la CdVRS específica de la enfermedad mediante SNOT-20 (0 a 5, 0 = mejor calidad de vida). Al final del tratamiento (tres meses) la puntuación SNOT-20 fue inferior en el grupo que recibió antibióticos macrólidos que en el grupo placebo (diferencia de medias [DM] -0,54 puntos; intervalo de confianza [IC] del 95%: -0,98 a -0,10), correspondiente a un tamaño del efecto moderado que favoreció a los antibióticos (pruebas de calidad moderada). Tres meses después del tratamiento no estuvo claro si hubo una diferencia entre los grupos.
Un estudio (33 participantes, con pólipos) proporcionó información sobre los trastornos gastrointestinales y la reacción alérgica presunta (erupción o irritación cutánea) después de un tratamiento de corta duración con el antibiótico tetraciclina en comparación con placebo. No hay seguridad con respecto a si los antibióticos se asociaron con un aumento de los trastornos gastrointestinales (cociente de riesgos [CR] 1,36; IC del 95%: 0,22 a 8,50) o irritación cutánea (CR 6,67; IC del 95%: 0,34 a 128,86) (pruebas de muy baja calidad).
Antibióticos sistémicos más irrigación salina y corticosteroides intranasales versus placebo más irrigación salina y corticosteroides intranasales
Un estudio (60 participantes, unos con y otros sin pólipos) comparó un ciclo de tres meses de un antibiótico macrólido con placebo; todos los participantes también recibieron irrigación salina y el 70% recibió corticosteroides intranasales. La CdVRS específica de la enfermedad se informó mediante SNOT-22 (0 a 110, 0 = mejor calidad de vida). Los datos fueron difíciles de interpretar (muy sesgados y con desequilibrios iniciales) y no está claro si hubo una diferencia importante en algún punto temporal (pruebas de baja calidad). Para evaluar a los participantes en la gravedad de la enfermedad informada por el paciente, los participantes calificaron el efecto del tratamiento en una escala de 5 puntos (-2 para "desesperadamente peor" a 2 para "curado") al final del tratamiento (tres meses). Para la mejoría en los síntomas no hubo diferencias entre los grupos de antibióticos y placebo; el CR fue 1,50 (IC del 95%: 0,81 a 2,79; pruebas de muy baja calidad), aunque también hubo ligeramente más pacientes que se sintieron peor después del tratamiento en el grupo de antibióticos. No hubo diferencias demostrables en la tasa de trastornos gastrointestinales entre los grupos (CR 1,07; IC del 95%: 0,16 a 7,10). La CdVRS general se midió con el SF-36. Los autores señalaron que no hubo diferencias entre los grupos al final del tratamiento (12 semanas) o dos semanas después.
Antibióticos sistémicos versus corticosteroides intranasales
Un estudio (43 participantes, sin pólipos) comparó un ciclo de tres meses de un antibiótico macrólido con corticosteroides intranasales. La gravedad de la enfermedad informada por el paciente se evaluó mediante una puntuación compuesta de los síntomas (0 a 40; 0 = ningún síntoma). No estuvo claro si hubo una diferencia ya que la gravedad de la enfermedad informada por el paciente fue similar entre los grupos (DM -0,32; IC del 95%: -2,11 a 1,47; pruebas de baja calidad).
Antibióticos sistémicos versus corticosteroides orales
Un estudio (28 participantes, con pólipos) comparó un tratamiento de corta duración del antibiótico tetraciclina (la duración no estuvo clara, ˜20 días) con un ciclo de 20 días de corticosteroides orales. No fue posible extraer datos sobre ninguno de los resultados primarios de eficacia. No estuvo claro si hubo una diferencia en lostrastornos gastrointestinales (CR 1,00; IC del 95%: 0,16 a 6,14) o la irritación cutánea (CR 2,00; IC del 95%: 0,20 a 19,62) ya que los hallazgos para estos resultados fueron similares entre los grupos (pruebas de muy baja calidad).