Muchas mujeres sufren incontinencia durante o después del embarazo y los ejercicios del músculo pélvico son una forma de ayudar. Una revisión Cochrane en mayo de 2020 presentó la evidencia de 46 ensayos que se comenta a continuación.
Este podcast ha sido traducido por Andrea Cervera y locutado por Montse León del Centro Cochrane Iberoamericano.
Muchas mujeres sufren incontinencia durante o después del embarazo y los ejercicios de los músculos pélvicos son una forma de ayudar. Una revisión Cochrane en mayo de 2020 presentó la evidencia de 46 ensayos que se describira a continuación.
Este podcast ha sido traducido por Andrea Cervera y locutado por Montse León del Centro Cochrane Iberoamericano.
Más de un tercio de las mujeres sufren incontinencia urinaria en el segundo y tercer trimestres del embarazo y alrededor de un tercio tiene pérdidas de orina en los primeros tres meses tras dar a luz. La incontinencia fecal es un poco menos habitual, pero ambas tienen una gran repercusión en la calidad de vida.
Se investigaron los efectos de realizar ejercicio del suelo pélvico durante el embarazo o después del parto sobre la incontinencia. Los ejercicios podrían ayudar a fortalecer los músculos del suelo pélvico, que ocupan el área entre las piernas. Estos músculos soportan la vejiga, el intestino y el útero y ayudan a detener la pérdida mediante el cierre de las salidas de la vejiga y el intestino. Los ejercicios fortalecen los músculos mediante su contracción varias veces seguidas, más de una vez al día, varios días a la semana, durante un período largo de tiempo.
En esta actualización de la revisión Cochrane de 2017, se añadieron informes de ocho ensayos lo que hace un total de 46. Estos proporcionan información de casi 11.000 mujeres de 21 países distintos asignadas al azar a recibir ejercicios de los músculos del suelo pélvico o no.
En general, los estudios no fueron grandes y la mayoría tuvieron problemas de diseño, lo que hace que la calidad global de la evidencia de más de la mitad de los estudios sea baja o muy baja. Los ejercicios difirieron considerablemente de un estudio a otro y su descripción fue a menudo vaga, aunque los hallazgos de los estudios en general fueron concordantes. No hubo suficientes datos para estar seguros de los efectos de los ejercicios sobre la incontinencia fecal y, por ello, las conclusiones se centran en los efectos sobre la incontinencia urinaria para los tres grupos principales de mujeres.
Se halló que las mujeres sin pérdidas de orina al empezar los ejercicios del suelo pélvico tenían menos probabilidades de sufrirlas durante el final del embarazo y tres a seis meses después del parto en comparación las mujeres que recibían atención habitual. Es decir que hacer los ejercicios previno la incontinencia urinaria.
Los estudios donde a las mujeres se les ofrecieron consejos sobre ejercicios de los músculos del suelo pélvico independientemente de si sufrían pérdidas de orina o no, investigaron un efecto mixto de prevención y tratamiento. Se observó que las mujeres que comenzaron los ejercicios durante el embarazo, tuvieron menos probabilidades de notificar incontinencia al final del embarazo y hasta seis meses después del parto.
Finalmente, el último conjunto de hallazgos principales son sobre el tratamiento. En las mujeres embarazadas que comenzaron con ejercicios de los músculos del suelo pélvico porque ya tenían pérdidas de orina, la información disponible es especialmente débil, y no existe evidencia que sugiera que los ejercicios reducen las pérdidas al final del embarazo o durante el año después de dar a luz. De manera similar, no existe evidencia de que las pérdidas se reduzcan en el año posterior al parto para las mujeres que comienzan los ejercicios tras este.
En conclusión, ofrecer ejercicios de los músculos del suelo pélvico a mujeres con continencia al principio del embarazo podría tener un efecto clínicamente importante en la prevención de la incontinencia urinaria en el final del embarazo y el posparto. Los efectos son menores, pero aún así importantes, cuando se adopta un enfoque mixto de prevención y tratamiento, pero no existe certeza sobre los efectos de los ejercicios de los músculos del suelo pélvico como tratamiento de la pérdida de orina en mujeres embarazadas y puérperas. Estos datos contrastan con la efectividad más establecida de los ejercicios en mujeres de mediana edad, y la cuestión merece ser investigada más a fondo.
Si desea saber más acerca de los hallazgos y los ejercicios y estar al día de futuras actualizaciones de la revisión, puede buscar ‘entrenamiento del suelo pélvico en el embarazo’ en la Biblioteca Cochrane punto com.