Muchas personas con problemas cardíacos o vasculares también presentan presión arterial elevada y la última actualización de la Revisión Cochrane sobre el uso de objetivos de presión arterial en su tratamiento se publicó en noviembre de 2022.
Este podcast ha sido traducido por Yasmín García y en él uno de sus autores, Luis Carlos Saiz del Servicio Navarro de Salud en Pamplona (España), nos habla de la revisión y de lo que en ella se observó.
Josefina: Hola, soy Josefina Bendersky, del Centro Cochrane Iberoamericano. Muchas personas con problemas cardíacos o vasculares también presentan presión arterial elevada y la última actualización de la Revisión Cochrane sobre el uso de objetivos de presión arterial en su tratamiento se publicó en noviembre de 2022.
Este podcast ha sido traducido por Yasmín García y en él uno de sus autores, Luis Carlos Saiz del Servicio Navarro de Salud en Pamplona (España), nos habla de la revisión y de lo que en ella se observó.
Luis: En el contexto clínico de una persona con problemas cardiacos o vasculares que presenta presión arterial elevada, algunas guías clínicas recomiendan objetivos de presión arterial intensivos (es decir, menos de 135 mmHg en la presión sistólica o 85 mmHg en la diastólica), en lugar de los objetivos estándar para pacientes hipertensos sin enfermedad cardiovascular (en este caso, de 140 a 160 mmHg en la presión sistólica y de 90 a 100 mmHg en la diastólica). Sin embargo, no está claro si los objetivos intensivos dan lugar a efectos beneficiosos netos para la salud.
En esta tercera actualización de la revisión Cochrane de los objetivos de presión arterial en personas con enfermedades cardiovasculares, analizamos la evidencia científica hasta enero de 2022. Incluimos ensayos controlados aleatorizados con más de 50 participantes por grupo, que proporcionaron al menos seis meses de seguimiento. Los participantes eran adultos hipertensos con antecedentes cardiovasculares de infarto de miocardio, accidente cerebrovascular, enfermedad vascular periférica o angina de pecho. Por otro lado, los informes de los ensayos debían presentar datos de al menos uno de los siguientes desenlaces: mortalidad total, eventos adversos graves, eventos cardiovasculares totales o mortalidad cardiovascular.
En esta actualización hemos incluido siete ensayos que reclutaron a casi 10 000 participantes, de los cuales seis proporcionaron datos de participantes individuales. Sobre la base de esta evidencia, observamos que probablemente hay poca o ninguna diferencia en la mortalidad total o la mortalidad cardiovascular entre los objetivos de presión arterial intensivos y los objetivos estándar. De manera similar, hubo poca o ninguna diferencia en los eventos adversos graves o los eventos cardiovasculares totales, pero la evidencia de estos resultados fue menos sólida, en particular sobre los abandonos debido a eventos adversos. No obstante, los estudios indicaron que un mayor número de personas abandonaron los ensayos debido a los efectos perjudiciales relacionados con los medicamentos en el grupo de objetivos intensivos.
En resumen, en las personas con hipertensión y enfermedad cardiovascular establecida, los ensayos aleatorizados actualmente disponibles no respaldan el tratamiento intensivo para lograr objetivos de presión arterial más bajos en comparación con los objetivos estándar de presión arterial. Esto fue consistente en nuestros análisis de subgrupos predefinidos por edad, sexo o la presencia de diabetes, no identificándose ningún subgrupo de población que se beneficiara del tratamiento intensivo. Por lo tanto, según la mejor evidencia disponible actualmente, la adopción de objetivos intensivos en personas con hipertensión y enfermedad cardiovascular establecida proporcionan un beneficio neto mínimo o nulo para la salud, en comparación con los objetivos estándar. Sin embargo, aún se requieren ensayos aleatorizados bien diseñados para determinar con mayor claridad los efectos beneficiosos (especialmente con respecto al desenlace de "eventos cardiovasculares totales") y los efectos perjudiciales derivados de las estrategias intensivas frente a las más conservadoras.
Josefina: Si desea obtener más información sobre los estudios incluidos y el uso de los datos de participantes individuales en esta actualización de la revisión, así como estar atento a la próxima actualización, encontrará esta revisión disponible en línea en la Biblioteca Cochrane al hacer una búsqueda de 'objetivos de presión arterial y enfermedad cardiovascular'.