Cuando se realiza una cesárea, se deben cortar varias capas del abdomen de la madre para acceder al bebé. Después del nacimiento del bebé, las capas deben volver a cerrarse. Esta revisión de estudios contempló diferentes maneras de cerrar la capa cutánea después de una cesárea. El cierre cutáneo se puede realizar mediante puntos que van por debajo de la piel, puntos que van sobre la piel o mediante grapas o clips. Los materiales de sutura disponibles actualmente son naturales o sintéticos, absorbibles o no-absorbibles, de filamento único o trenzados. Las grapas son atractivas debido a la velocidad de aplicación.
Se identificaron 19 ensayos controlados aleatorizados y se incluyeron 11, pero sólo ocho contribuyeron con datos. Los métodos de cierre cutáneo más comúnmente estudiados fueron las grapas no absorbibles en comparación con las suturas subcutáneas absorbibles. Las grapas se asociaron con resultados similares en cuanto a la infección de la herida, el dolor y la apariencia en comparación con las suturas. Las grapas no absorbibles tenían un mayor riesgo de separación de la piel y, por lo tanto, de volver a cerrarse. La separación de la piel se definió de forma diferente en los ensayos y la extracción de las grapas varió desde aproximadamente el día tres al día siete después de la operación.
No hay suficiente evidencia de los estudios incluidos para decir qué método de cierre de la incisión cutánea de la cesárea es superior. Muy pocos ensayos compararon los diferentes tipos de suturas. El uso de antibióticos profilácticos para reducir la infección no se informó en la mayoría de los ensayos.
No hay en este momento evidencia concluyente sobre cómo se debería cerrar la piel después de una cesárea. Las grapas se asocian con resultados similares en cuanto a la infección de la herida, el dolor y la estética en comparación con las suturas, y estos dos son los métodos más comúnmente estudiados para el cierre de la piel después de una cesárea. Si se retiran las grapas en el tercer día, hay una mayor incidencia de separación de la piel y la necesidad de volver a cerrarla en comparación con las suturas absorbibles.
La cesárea es una operación común sin un estándar acordado en cuanto a ciertas técnicas operativas o materiales a utilizar. En cuanto al cierre de la piel, la incisión de la piel puede ser reabierta por una sutura subcuticular inmediatamente debajo de la capa de la piel, por una sutura interrumpida o por grapas. Para el cierre cutáneo luego de una cesárea se usa una gran variedad de materiales y técnicas, y se deben identificar aquellas que producen los mejores resultados para las pacientes.
Comparar los efectos de las técnicas y los materiales de cierre cutáneo sobre los resultados maternos y el tiempo necesario para realizar una cesárea.
Se hicieron búsquedas en el registro de ensayos del Grupo Cochrane de Embarazo y Parto (Cochrane Pregnancy and Childbirth Group) (10 enero 2012).
Se seleccionaron todos los ensayos aleatorizados que comparaban diferentes materiales de cierre cutáneo en las cesáreas. Dos revisores de forma independiente extrajeron todos los datos.
Se identificaron 19 ensayos y se incluyeron 11, pero sólo ocho ensayos aportaron datos. Tres ensayos no fueron ensayos controlados aleatorizados; dos estaban en curso; un estudio se terminó y los resultados no estaban disponibles para la revisión; uno está a la espera de clasificación; y uno no comparó los materiales de cierre de la piel, sino la colocación de la sutura con la sutura y la localización del drenaje.
Los dos métodos de cierre de la piel para la cesárea que se han comparado con mayor frecuencia son las grapas no absorbibles y las suturas subcutáneas absorbibles. En comparación con las suturas subcutáneas absorbibles, las grapas no absorbibles se asocian con incidencias similares de infección de la herida. Otras medidas de resultado secundarias importantes, como las complicaciones de las heridas, también fueron similares entre los grupos de mujeres con incisiones de Pfannenstiel. Sin embargo, es importante señalar que para ambos resultados (infección y complicación de la herida), las grapas pueden tener un efecto diferencial dependiendo del tipo de incisión cutánea, es decir, Pfannenstiel o vertical. En comparación con las suturas subcutáneas absorbibles, las grapas no absorbibles se asocian con un mayor riesgo de separación de la piel y, por lo tanto, de reapertura. Sin embargo, la separación de la piel se definió de forma variable entre los ensayos y la mayoría de las grapas se retiraron antes de los cuatro días postparto.
La traducción y edición de las revisiones Cochrane han sido realizadas bajo la responsabilidad del Centro Cochrane Iberoamericano, gracias a la suscripción efectuada por el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad del Gobierno español. Si detecta algún problema con la traducción, por favor, contacte con Infoglobal Suport, cochrane@infoglobal-suport.com.