Más de 34 000 000 de personas actualmente conviven con la infección por el VIH. El tratamiento antirretroviral (TAR) puede ayudar a estos pacientes a vivir más tiempo y de forma más saludable, aunque debido a los efectos secundarios, el cumplimiento (tomar la medicación todos los días) puede ser difícil. Los mensajes de texto por telefonía móvil tienen el potencial de ayudar a promover el cumplimiento en estos pacientes.
En la revisión se incluyeron dos ensayos controlados aleatorios de Kenia. Un ensayo comparó mensajes de texto cortos semanales con atención estándar. El otro ensayo comparó mensajes cortos diarios, mensajes largos diarios, mensajes cortos semanales y mensajes largos semanales con atención estándar.
En el ensayo que comparó solamente los mensajes cortos semanales con atención estándar, los mensajes de texto se asociaron con un menor riesgo de falta de cumplimiento a los 12 meses y con la no aparición de fracaso virológico a los 12 meses.
Al combinar los datos de ambos ensayos, los mensajes de texto semanales por telefonía móvil se asociaron con un mayor cumplimiento con el TAR a las 48 a 52 semanas. El efecto de los mensajes de texto cortos semanales también fue significativo.
En el ensayo que comparó diferentes intervalos y extensiones de los mensajes de texto con atención estándar, los mensajes de texto largos semanales no se asociaron significativamente con un menor riesgo de falta de cumplimiento en comparación con atención estándar. Los pacientes que recibieron mensajes de texto semanales de cualquier extensión tuvieron un menor riesgo de falta de cumplimiento a las 48 semanas que los pacientes que recibieron mensajes diarios de cualquier extensión. No hubo diferencias significativas entre los mensajes de texto semanales de cualquier extensión y entre los mensajes cortos o largos a cualquier intervalo. En comparación con atención estándar, los mensajes de texto diarios, ya sea cortos o largos, no redujeron el riesgo de falta de cumplimiento.
Los mensajes de texto semanales por telefonía móvil a los pacientes que reciben TAR pueden ayudarlos a tomar la medicación todos los días. También pueden ayudar a reducir la cantidad de VIH en sangre.
Debido a que los dos ensayos incluidos se realizaron en pacientes adultos solamente, se necesitan ensayos sobre esta intervención en adolescentes. Además, debido a que los dos ensayos se realizaron en Kenia, un país de ingresos bajos, se necesitan ensayos sobre esta intervención en países de ingresos altos.
Hay pruebas de alta calidad de los dos ECA de que los mensajes de texto por telefonía móvil a intervalos semanales son efectivos para mejorar el cumplimiento con el TAR, en comparación con atención estándar. Hay pruebas de alta calidad de un ensayo de que los mensajes de texto semanales por telefonía móvil son efectivos para mejorar la supresión de la carga viral del VIH. Los elaboradores de políticas deben considerar la posibilidad de financiar programas que propongan proporcionar mensajes de texto semanales por telefonía móvil como una forma de promover el cumplimiento con el tratamiento antirretroviral. Clínicas y hospitales deberían considerar la implementación de estos programas. Se necesitan ECA grandes sobre esta intervención en poblaciones adolescentes, así como en países de ingresos altos.
Más de 34 000 000 de personas actualmente conviven con la infección por el VIH. El tratamiento antirretroviral (TAR) puede ayudar a estos pacientes a vivir más tiempo y de forma más saludable, aunque el cumplimiento con el TAR puede ser difícil. Los mensajes de texto por telefonía móvil tienen el potencial de ayudar a promover el cumplimiento en estos pacientes.
Determinar si los mensajes de texto por telefonía móvil son efectivos para mejorar el cumplimiento con el TAR en pacientes con infección por el VIH.
Mediante las estrategias de búsqueda validadas por la Colaboración Cochrane para identificar ensayos controlados aleatorios e informes de intervenciones contra el VIH, junto con las palabras clave adecuadas y términos MeSH, se realizaron búsquedas en varias bases de datos electrónicas que incluyeron el Registro Cochrane Central de Ensayos Controlados (Cochrane Central Register of Controlled Trials, CENTRAL), EMBASE, Literatura Latino-Americana e do Caribe em Ciências da Saúde (LILACS), MEDLINE (vía PubMed), PsycINFO, Web of Science, y la World Health Organization (WHO) Global Index Medicus. El intervalo de fechas abarcó del 1 de enero de 1980 hasta el 1 de noviembre de 2011. No hubo restricciones de idioma o en el estado de la publicación.
Ensayos controlados aleatorios (ECA) en los que los pacientes o sus cuidadores (en el caso de lactantes y niños) de cualquier edad, en cualquier contexto y que recibían TAR recibieron mensajes de texto por telefonía móvil como una forma de promover el cumplimiento con el TAR.
Dos revisores examinaron de forma independiente los resúmenes de todos los ensayos identificados. Inicialmente se identificaron 243 referencias. Se examinó atentamente el texto completo de 17 artículos. Ambos revisores extrajeron los datos de forma independiente mediante un formulario de extracción de datos prediseñado y estandarizado. Cuando fue apropiado, los datos se combinaron en un metanálisis.
En la revisión se incluyeron dos ECA de Kenia. Un ensayo comparó mensajes de texto cortos semanales con atención estándar. El otro ensayo comparó mensajes cortos diarios, mensajes largos diarios, mensajes cortos semanales y mensajes largos semanales con atención estándar. Ambos ensayos se realizaron con pacientes adultos.
En el ensayo que comparó solo los mensajes cortos semanales con atención estándar, los mensajes de texto se asociaron con un menor riesgo de falta de cumplimiento a los 12 meses (CR 0,77; IC del 95%: 0,63 a 0,93) y con la no aparición de fracaso virológico a los 12 meses (CR 0,83; IC del 95%: 0,69 a 0,99).
En el ensayo que comparó diferentes intervalos y extensiones de los mensajes de texto con atención estándar, los mensajes de texto largos semanales no se asociaron significativamente con un menor riesgo de falta de cumplimiento en comparación con atención estándar (CR 0,79; IC del 95%: 0,60 a 1,04). Los pacientes que recibieron mensajes de texto semanales de cualquier extensión tuvieron un menor riesgo de falta de cumplimiento a las 48 semanas que los pacientes que recibieron mensajes diarios de cualquier extensión (CR 0,79; IC del 95%: 0,64 a 0,99). No hubo diferencias significativas entre los mensajes de texto semanales de cualquier extensión (CR 1,01; IC del 95%: 0,75 a 1,37) y entre los mensajes cortos o largos a cualquier intervalo (CR 0,99; IC del 95%: 0,78 a 1,27). En comparación con atención estándar, los mensajes de texto diarios, ya sean cortos o largos, no redujeron el riesgo de falta de cumplimiento (CR 0,99; IC del 95%: 0,82 a 1,20).
En el metanálisis de ambos ensayos, cualquier mensaje de texto semanal (es decir, mensajes cortos o largos) se asoció con un menor riesgo de falta de cumplimiento a las 48 a 52 semanas (CR 0,78; IC del 95%: 0,68 a 0,89). El efecto de los mensajes de texto cortos semanales también fue significativo (CR 0,77; IC del 95%: 0,67 a 0,89).