Cochrane ha elaborado unas 40 revisiones sistemáticas de intervenciones que podrían ayudar a las personas tras un paro cardiaco. En este podcast se habla sobre la actualización de mayo de 2023 de una de estas revisiones que analiza los efectos de una intervención denominada hipotermia terapéutica o control de la temperatura en pacientes que han sido reanimados tras un paro cardiaco.
Este podcast ha sido traducido por Yasmín García del Centro Cochrane Iberoamericano y locutado por Ania Torres Pombert del centro afiliado Cochrane: Centro Nacional Coordinador de Ensayos Clínicos (CENCEC) de Cuba.
Cochrane ha elaborado unas 40 revisiones sistemáticas de intervenciones que podrían ayudar a las personas tras un paro cardiaco. En este podcast se habla sobre la actualización de mayo de 2023 de una de estas revisiones que analiza los efectos de una intervención denominada hipotermia terapéutica o control de la temperatura en pacientes que han sido reanimados tras un paro cardiaco.
Este podcast ha sido traducido por Yasmín García del Centro Cochrane Iberoamericano y locutado por Ania Torres Pombert del centro afiliado Cochrane: Centro Nacional Coordinador de Ensayos Clínicos (CENCEC) de Cuba con la colaboración del Ministerio de Sanidad de España.
La hipotermia terapéutica es un tratamiento especializado para las personas que han sido reanimadas tras un paro cardiaco. En muchos casos, estas personas sufren daños cerebrales graves y la hipotermia terapéutica, que consiste en enfriar el cuerpo a una temperatura específica y mantenerla durante un periodo de tiempo, se ha indicado como una forma de prevenir o limitar estos daños cerebrales.
El impacto del paro cardiaco súbito en las personas y sus familias puede ser devastador, por lo que se necesita evidencia fiable sobre lo que se podría hacer para mejorar los resultados, y entre estos tratamientos podría estar la hipotermia terapéutica. A lo largo del tiempo, numerosos estudios han arrojado resultados diversos, algunos positivos y otros neutros, y cada estudio ha tenido sus limitaciones.
Por consiguiente, las guías clínicas posteriores a estos estudios han sufrido cambios, proponiéndose diferentes temperaturas objetivo, y persisten los debates entre los expertos en la materia con diferentes recomendaciones entre los distintos países.
Al realizar esta revisión se intentó proporcionar una revisión independiente actualizada de la evidencia científica relacionada con la hipotermia terapéutica a 33 °C para pacientes que han sido reanimados con éxito tras un paro cardiaco. Se quería ayudar a los médicos a tomar decisiones bien informadas y proporcionar información completa a los pacientes, sus familias y al público en general.
Esta revisión se ha centrado en un resultado orientado al paciente conocido como "desenlace neurológico favorable", que significa que los pacientes son capaces de llevar una vida independiente, en lugar de experimentar discapacidades más graves. Se analizaron 12 ensayos clínicos, con casi 4000 pacientes, que compararon la hipotermia terapéutica con diversos tratamientos estándar, incluido el control de la fiebre, el control de la temperatura a 36 °C o ningún control de la temperatura.
Cuando se comparó la hipotermia a 33 °C frente a cualquier tipo de tratamiento estándar, se observó que los participantes tenían un 40 % más de probabilidades de alcanzar un desenlace neurológico favorable, lo que es similar al hallazgo de la versión previa de esta revisión en 2016. Este resultado pareció sólido frente a las limitaciones en la calidad de los estudios incluidos. Cuando se analizaron los efectos en subgrupos de pacientes, el número de estos análisis fue pequeño, pero aun así se obtuvieron algunos resultados interesantes. Por ejemplo, el efecto pareció ser mayor en los pacientes con peor pronóstico, como los que sufrieron un paro cardiaco sin la presencia de testigos o los que tardaron más en ser reanimados. Los efectos fueron menores si el inicio del tratamiento se retrasaba varias horas.
Es importante tener en cuenta los efectos perjudiciales potenciales y vigilar de cerca a los pacientes para detectar episodios adversos, en particular los relacionados con la neumonía, los niveles bajos de potasio y las arritmias.
A pesar de las limitaciones con la heterogeneidad y las limitaciones de los estudios incluidos, la hipotermia terapéutica a 33°C utilizando métodos de enfriamiento convencionales puede mejorar el desenlace neurológico tras un paro cardiaco. Sin embargo, es fundamental tener en cuenta las limitaciones de la evidencia y contar con estudios de calidad alta que empleen la aplicación oportuna de la hipotermia para establecer resultados más claros y sólidos; especialmente en los grupos de pacientes que parecen beneficiarse más.
La revisión está disponible en línea. Si consulta la Biblioteca Cochrane y escribe "hipotermia tras un paro cardiaco" en el cuadro de búsqueda, verá un enlace a esta revisión.