El ibuprofeno es un analgésico muy utilizado, por lo que una nueva revisión Cochrane de enero de 2024 reunió la evidencia sobre su uso para el dolor posoperatorio en niños y en este podcast se habla sobre sus resultados.

Este podcast ha sido traducido por Yasmín García y locutado por Andrea Cervera del Centro Cochrane Iberoamericano.

Es frecuente que los niños sientan dolor tras una intervención quirúrgica u otro tratamiento doloroso. Esto les causa sufrimiento y agitación, puede retrasar su recuperación y ser angustioso para sus padres o cuidadores. Sin embargo, a menudo resulta difícil evaluar y tratar el dolor en los niños, y aún no se ha definido la mejor manera de alcanzar estos objetivos. Una estrategia habitual es el uso de fármacos, como el ibuprofeno, un tipo de medicamento denominado “antinflamatorio no esteroideo” (AINE) que puede reducir la inflamación y el dolor.
En esta revisión el ibuprofeno se comparó con otros tratamientos analgésicos a fin de evaluar su eficacia para tratar el dolor y la posible aparición de eventos adversos que pudieran estar relacionados con el tratamiento. También se buscó evidencia sobre las formas más eficaces de administrar ibuprofeno a los niños, pero no se encontraron estudios relevantes.
Al revisar la bibliografía se encontraron 43 estudios elegibles que habían reclutado a casi 4300 niños con dolor posoperatorio. Fue posible utilizar los datos de 3900 de estos niños con edades comprendidas entre un par de meses y 17 años. Los estudios procedían de muchos países de todo el mundo y habían utilizado ibuprofeno para tratar el dolor posoperatorio después de 10 tipos diferentes de cirugía. La mayoría, 21 estudios, eran intervenciones dentales, pero también había 11 de operaciones otorrinolaringológicas.
En cuanto a la eficacia, el ibuprofeno es probablemente mejor que el placebo para reducir la intensidad del dolor en las dos horas siguientes a la operación y podría reducir la intensidad del dolor hasta las 24 horas. En comparación con el paracetamol, el ibuprofeno probablemente reduce la intensidad del dolor en las dos primeras horas y también en el periodo de hasta 24 horas. No es posible estar seguros de que haya diferencias en los efectos no deseados entre el ibuprofeno, el placebo y el paracetamol, y probablemente haya poca diferencia en las posibilidades de hemorragia con el ibuprofeno en comparación con el paracetamol. Al explorar el efecto del ibuprofeno frente a la morfina, el ibuprofeno probablemente da lugar a una reducción de cualquier efecto no deseado mientras que, en comparación con el ketorolaco, podría dar lugar a una reducción de los efectos perjudiciales generales. Ningún estudio informó sobre la intensidad del dolor ni los efectos no deseados graves de la morfina ni el ketorolaco.
Debido a que no hay suficientes estudios grandes que comparen el ibuprofeno con otras alternativas, no se tiene confianza en la evidencia general del uso del ibuprofeno en el dolor posoperatorio en niños. Además, se necesitan más estudios debido a que muy pocos proporcionaron datos acerca de los efectos beneficiosos importantes y los efectos no deseados en niños que presentan dolor después de cirugía, especialmente a largo plazo.
Los estudios de investigación futuros deben tener como objetivo evaluar el modo y la administración óptimos del ibuprofeno en niños mediante la exploración del efecto del ibuprofeno a diferentes dosis, diferentes vías de administración y diferentes momentos y horarios. Los estudios futuros también deben informar sobre los efectos adversos, especialmente los efectos adversos graves, para reducir las incertidumbres en la base de evidencia actual.

La revisión está disponible en línea en la Biblioteca Cochrane y para encontrarla se puede buscar el título “ibuprofeno para el dolor posoperatorio agudo en niños”.