Los siete huesos que constituyen la región del cuello de la columna vertebral se denominan vértebras cervicales. La primera vértebra, denominada atlas, sostiene el cráneo. Debajo de ella se encuentra el eje o segunda vértebra, que tiene un proceso espinoso ascendente denominado proceso odontoideo alrededor del cual puede rotar el atlas, lo que permite girar la cabeza. La fractura del proceso odontoideo es una lesión grave y a menudo mortal. En los supervivientes existe el riesgo de daño progresivo de la médula espinal y parálisis. Las personas con estas fracturas suelen tratarse de forma conservadora, que incluye la estabilización del cuello durante varios meses con dispositivos como el "Halo" (marco externo) o el collarín rígido. Otra opción es la estabilización quirúrgica de las partes fracturadas. La revisión intentó examinar la evidencia de los ensayos controlados aleatorizados que compararan el tratamiento quirúrgico versus el conservador para estas fracturas, para averiguar si alguno de estos enfoques proporciona un mejor desenlace. A pesar de la búsqueda exhaustiva que realizaron los autores de la revisión, no se encontró evidencia en ensayos controlados aleatorizados completados para facilitar la decisión informada entre el tratamiento quirúrgico y el conservador.