La neumonía es una infección de los pulmones causada generalmente por bacterias y virus. Su diagnóstico clínico es a veces difícil. La neumonía es más frecuente en los niños pequeños y en las personas de edad avanzada. En los países de bajos ingresos causa dos millones de muertes anuales entre los niños pequeños. En los EE.UU. es la causa más frecuente de muerte por infección.
La vitamina C se identificó a principios del siglo XX y las indicaciones de que una de sus funciones biológicas podría ser la de resistir a las infecciones están respaldadas por numerosos estudios en animales. Se buscaron estudios en seres humanos y se encontraron tres ensayos con un total de 2335 participantes que analizaron si la vitamina C previene la neumonía en la comunidad. Dos de estos ensayos preventivos estudiaron a soldados, mientras que el tercero estudió a niños en un internado del Reino Unido en la década de 1940. Dos ensayos terapéuticos con un total de 197 pacientes con neumonía examinaron si la vitamina C podría tener efectos beneficiosos en los pacientes con neumonía. Uno estudió pacientes de 66 a 94 años en el Reino Unido con neumonía. El otro ensayo terapéutico se realizó en la antigua Unión Soviética, pero no se describieron los antecedentes sociales y nutricionales de los pacientes. Un estudio con 37 pacientes con quemaduras examinó el efecto de la vitamina C en la neumonía adquirida en el hospital. Las búsquedas se actualizaron en abril de 2013.
Cinco de los ensayos identificados encontraron efectos beneficiosos preventivos o terapéuticos de la vitamina C contra la neumonía, pero el estudio sobre la neumonía adquirida en el hospital no encontró efectos. La calidad general de los ensayos fue buena. Sin embargo, los cinco ensayos con resultados positivos se realizaron en condiciones tan extraordinarias que los resultados no se deben extrapolar a la población en general. Por lo tanto, se necesitan más estudios de investigación. Mientras tanto, complementar a los pacientes con neumonía que tienen bajos niveles de vitamina C en plasma puede ser razonable por su seguridad y bajo costo. Ninguno de los cinco ensayos informó de efectos adversos dignos de mención de la vitamina C.
El uso profiláctico de la vitamina C para prevenir la neumonía se debe investigar más a fondo en las poblaciones que tienen una alta incidencia de neumonía, especialmente si la ingesta de vitamina C en la dieta es baja. Del mismo modo, se deben estudiar los efectos terapéuticos de la vitamina C, especialmente en pacientes con bajos niveles de vitamina C en plasma. La evidencia actual es demasiado débil para abogar por el uso profiláctico de la vitamina C para prevenir la neumonía en la población general. No obstante, la suplementación terapéutica con vitamina C puede ser razonable en los pacientes con neumonía que tienen niveles bajos de vitamina C en plasma porque su costo y sus riesgos son bajos.
La neumonía es una de las infecciones graves más frecuentes, que causa dos millones de muertes anuales entre los niños pequeños en los países de bajos ingresos. En los países de ingresos altos, la neumonía es un problema más importante en las personas de edad avanzada.
Evaluar los efectos profilácticos y terapéuticos de la vitamina C en la neumonía.
Se hicieron búsquedas en CENTRAL 2013, número 3, MEDLINE (1950 hasta marzo, semana 4, 2013), EMBASE (1974 hasta abril de 2013) y Web of Science (1955 hasta abril de 2013).
Para evaluar los efectos terapéuticos de la vitamina C se seleccionaron ensayos controlados con placebo. Para evaluar los efectos profilácticos se seleccionaron ensayos controlados con placebo o no.
Dos autores de la revisión, de forma independiente, leyeron los informes de los ensayos y extrajeron los datos.
Se identificaron tres ensayos profilácticos que registraron 37 casos de neumonía adquirida en la comunidad en 2335 personas. Sólo uno fue satisfactoriamente aleatorizado, doble ciego y controlado con placebo. Dos ensayos examinaron a reclutas militares y el tercero estudió a chicos de "clases con salarios más bajos" que asistían a un internado en el Reino Unido durante la Segunda Guerra Mundial. Cada uno de estos tres ensayos encontró una reducción estadísticamente significativa (80% o más) en la incidencia de neumonía en el grupo de vitamina C. Se identificaron dos ensayos terapéuticos con 197 pacientes con neumonía adquirida en la comunidad. Sólo uno fue satisfactoriamente aleatorizado, doble ciego y controlado con placebo. En ese ensayo se estudiaron pacientes de edad avanzada en el Reino Unido y se encontró una menor mortalidad y una reducción de la gravedad en el grupo de vitamina C; sin embargo, el efecto beneficioso se limitó a los pacientes más enfermos. El otro ensayo terapéutico estudió a adultos con un amplio rango de edad en la antigua Unión Soviética y encontró una reducción dependiente de la dosis en la duración de la neumonía con dos dosis de vitamina C. Se identificó un ensayo profiláctico en el que se registraron 13 casos de neumonía adquirida en el hospital en 37 pacientes con quemaduras graves; la administración de vitamina C durante un día no tuvo efectos en la incidencia de neumonía. Los estudios identificados son clínicamente heterogéneos, lo que limita su comparabilidad. Los estudios incluidos no encontraron efectos adversos de la vitamina C.
La traducción y edición de las revisiones Cochrane han sido realizadas bajo la responsabilidad del Centro Cochrane Iberoamericano, gracias a la suscripción efectuada por el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad del Gobierno español. Si detecta algún problema con la traducción, por favor, contacte con Infoglobal Suport, cochrane@infoglobal-suport.com.