Durante las intervenciones quirúrgicas, la temperatura corporal de los pacientes puede disminuir como resultado de una combinación de factores incluida la acción de los fármacos anestésicos, la presencia de piel descubierta y la administración de líquidos fríos en las venas o en las partes del cuerpo en las que se realiza la cirugía para realizar lavados. La disminución de la temperatura durante la cirugía puede ser desagradable y puede causar temblores excesivos después de la cirugía. También puede causar problemas cardíacos y problemas de hemorragias y puede contribuir con problemas de úlceras por presión y en la curación de la herida y una estancia hospitalaria más prolongada. Esta revisión intenta determinar si la climatización de los líquidos administrados de forma intravenosa o utilizados para el lavado de partes del cuerpo puede prevenir la disminución de la temperatura en los pacientes.
Se efectuaron búsquedas en las bases de datos médicas hasta febrero de 2014 para encontrar estudios que compararan líquidos climatizados con líquidos no climatizados y otros métodos de climatización del paciente. Se encontraron 24 ensayos relevantes con 1250 pacientes adultos sometidos a todo tipo de cirugía. No se incluyeron los estudios en los cuales la intención era disminuir la temperatura del paciente (como para facilitar la cirugía de revascularización coronaria). Se había planificado recopilar datos sobre qué pacientes habían presentado hipotermia (cuando la temperatura corporal desciende por debajo de 36 grados Celsius), pero ningún ensayo presentó esta información, de manera que se recopilaron datos sobre la temperatura de los pacientes en diversos puntos temporales durante la cirugía.
Se encontraron pruebas de calidad moderada que indicaron que al climatizar los líquidos administrados a los pacientes de forma intravenosa, su temperatura fue mayor en alrededor de medio grado Celsius y los temblores fueron menores que en los que recibieron líquidos no climatizados; sin embargo, no fue posible mostrar una diferencia significativa en los pacientes que recibieron líquidos climatizados para el lavado de partes del cuerpo.
Se ha demostrado que la climatización de los líquidos mantiene una temperatura mayor en los pacientes adultos; sin embargo, no está claro si este procedimiento solo puede lograr un cambio en las complicaciones graves que puede causar la disminución de la temperatura.
Los líquidos intravenosos climatizados parecen mantener a los pacientes con una temperatura mayor durante la cirugía que los líquidos a temperatura ambiente. No está claro si las diferencias reales en la temperatura son clínicamente significativas, o si existen otros efectos beneficiosos o perjudiciales asociados con la climatización de los líquidos. Tampoco está claro si la climatización de los líquidos además de otros métodos de climatización proporciona algún efecto beneficioso, debido a que es probable observar un efecto tope cuando se utilizan métodos múltiples de climatización.
La hipotermia perioperatoria inadvertida (una disminución en la temperatura central por debajo de los 36°C) ocurre debido a la interferencia en la regulación de la temperatura normal de los fármacos anestésicos, la piel expuesta durante períodos prolongados y la recepción de volúmenes grandes de líquidos intravenosos y de irrigación. Si la temperatura de estos líquidos está por debajo de la temperatura corporal central, puede causar una pérdida significativa de calor. La climatización de los líquidos intravenosos y de irrigación a la temperatura corporal central o a una temperatura superior podría prevenir algo de esta pérdida de calor y la hipotermia posterior.
Calcular la efectividad de la climatización preoperatoria o intraoperatoria, o ambas, de los líquidos intravenosos y de irrigación en la prevención de la hipotermia perioperatoria y sus complicaciones durante la cirugía en adultos.
Se hicieron búsquedas en el Registro Cochrane Central de Ensayos Controlados (Cochrane Central Register of Controlled Trials) (2014, número 2), MEDLINE Ovid SP (1956 hasta 4 febrero 2014), EMBASE Ovid SP (1982 hasta 4 febrero 2014), el Institute for Scientific Information (ISI) Web of Science (1950 hasta 4 febrero 2014), Cumulative Index to Nursing and Allied Health Literature (CINAHL) EBSCOhost (1980 hasta 4 febrero 2014), así como en listas de referencias de artículos identificados. También se hicieron búsquedas en el sitio web de Current Controlled Trials y ClinicalTrials.gov.
Se incluyeron los ensayos controlados aleatorios o ensayos controlados cuasialeatorios que compararon métodos de climatización de líquidos versus atención estándar o versus otros métodos de climatización utilizados para mantener la normotermia.
Dos autores de la revisión extrajeron de forma independiente los datos de los ensayos elegibles y las discusiones se resolvieron con un tercer autor de la revisión. Cuando fue necesario, se estableció contacto con los autores de los estudios para solicitar datos adicionales. Se recopilaron datos sobre los eventos adversos sólo si se informaron en los ensayos.
Se incluyeron en esta revisión 24 estudios con un total de 1250 participantes. Los ensayos incluyeron diversos números y tipos de participantes. Los investigadores utilizaron diversos métodos para climatizar los líquidos a temperaturas entre 37°C y 41°C. Se encontró que las pruebas fueron de calidad moderada debido a que las descripciones del diseño de los ensayos a menudo fueron inciertas, lo que dio lugar a un riesgo alto o incierto de sesgo debido a que la asignación al azar y el cegamiento de los procedimientos no fueron apropiados o fueron inciertos. Estos factores pueden haber influido en los resultados de alguna manera. El protocolo especificó el riesgo de hipotermia como el resultado primario; debido a que ningún ensayo informó este resultado, se decidió incluir los datos relacionados con la temperatura central media. El único resultado secundario informado en los ensayos que proporcionó datos utilizables fue la presencia de temblores. Las pruebas fueron inciertas con respecto a los efectos de la climatización de los líquidos sobre la hemorragia. No se informaron datos sobre otros resultados especificados de complicaciones cardiovasculares, infección, úlceras por presión, hemorragias, mortalidad, estancia hospitalaria, ingreso no planificado a la unidad de cuidados intensivos y eventos adversos.
Los investigadores encontraron que los líquidos intravenosos climatizados mantuvieron la temperatura central de los participantes del estudio en aproximadamente medio grado más alta que la de los participantes que recibieron líquidos intravenosos a temperatura ambiente a los 30; 60; 90 y 120 minutos y al final de la cirugía. Los líquidos intravenosos climatizados también redujeron aún más el riesgo de temblores en comparación con los líquidos intravenosos a temperatura ambiente.
Los investigadores no informaron diferencias estadísticamente significativas en la temperatura corporal central o los temblores entre los individuos que recibieron líquidos de irrigación climatizados y a temperatura ambiente.