Pregunta de la revisión
¿El uso de drenaje reduce las complicaciones posoperatorias tras la cirugía pancreática?
Antecedentes
Los drenajes quirúrgicos son una práctica muy habitual después de la cirugía pancreática. No obstante, la función del drenaje para reducir las complicaciones tras la cirugía pancreática (llamadas complicaciones posoperatorias) es polémica.
Fecha de la búsqueda
La evidencia está actualizada hasta febrero de 2021.
Características de los estudios
Se buscaron todos los estudios relevantes y bien realizados hasta febrero de 2021. Se incluyeron nueve estudios controlados aleatorizados (un experimento en el que los participantes se asignan al azar a dos o más intervenciones, posiblemente incluye una intervención control o ninguna intervención, y los resultados se comparan). Los nueve estudios incluyeron a 1892 participantes que se sometieron a una cirugía pancreática. Cuatro de los nueve estudios asignaron al azar a 1110 participantes a usar drenaje (número de participantes = 560) o no usar drenaje (n = 550). Dos estudios asignaron al azar a 383 participantes a un drenaje activo (drenajes con succión de baja o alta presión, n = 194) y a un drenaje pasivo (drenajes sin succión, n = 189). Tres estudios asignaron al azar a 399 participantes con bajo riesgo de fístula pancreática posoperatoria (una comunicación anómala entre el páncreas y otros órganos cercanos debido a una filtración del jugo pancreático que contiene enzimas digestivas por conductos pancreáticos dañados) al retiro temprano del drenaje (n = 200) o al retiro tardío (n = 199).
Fuentes de financiación de los estudios
Cinco de los nueve estudios incluidos fueron patrocinados por becas no comerciales. Dos estudios no recibieron financiación. Los otros dos estudios no informaron sus fuentes de financiación.
Resultados clave
El uso del drenaje podría reducir la muerte a los 90 días. En comparación con no utilizar drenajes, la evidencia indica que el uso de drenajes podría conllevar una diferencia escasa o nula en la mortalidad a los 30 días, la infección de la herida, la duración de la hospitalización, la necesidad de realizar otras operaciones abiertas por complicaciones posoperatorias y en la calidad de vida. Hubo una complicación relacionada con el drenaje (el tubo de drenaje estaba roto) en el grupo de drenaje (0,2%). Es probable que el uso de drenajes supusiera poca o ninguna diferencia en las complicaciones generales. La evidencia fue muy incierta con respecto al efecto del uso de drenajes sobre las infecciones en el abdomen y la necesidad de realizar otras intervenciones radiológicas por las complicaciones posoperatorias.
En comparación con un drenaje pasivo, la evidencia fue muy poco clara acerca del efecto de un drenaje activo sobre la mortalidad a los 30 días, las infecciones en el abdomen, las infecciones de la herida, las complicaciones generales, la duración de la hospitalización y la necesidad de realizar otras operaciones abiertas por complicaciones posoperatorias. No hubo complicaciones relacionadas con el drenaje en ninguno de los grupos.
La evidencia fue muy poco clara con respecto al efecto del retiro temprano del drenaje sobre la mortalidad a los 30 días, las infecciones de la herida, los costes hospitalarios y la necesidad de realizar otras intervenciones abiertas o radiológicas por complicaciones posoperatorias. Se encontró que el retiro temprano del drenaje podría reducir las infecciones en el abdomen, las complicaciones generales y la duración de la hospitalización, pero la evidencia fue muy poco clara. Ninguno de los estudios informó sobre complicaciones relacionadas con el drenaje.
No está claro si el uso habitual de drenajes tuvo algún efecto en la mortalidad a los 30 días o en las complicaciones tras la cirugía, en comparación con no usar drenajes. El uso habitual de drenajes podría reducir la mortalidad a los 90 días en comparación con no usarlos. La evidencia es muy incierta con respecto al efecto del drenaje activo sobre la mortalidad a los 30 días o las complicaciones posoperatorias, en comparación con el drenaje pasivo. En comparación con el retiro tardío del drenaje, el retiro temprano parece reducir las infecciones en el abdomen, las complicaciones generales, la duración de la hospitalización en personas con un riesgo bajo de fístula pancreática posoperatoria, pero la evidencia es muy incierta.
Certeza de la evidencia
Los nueve estudios presentaron deficiencias que podían afectar a la fiabilidad de los resultados. En general, la certeza de la evidencia varió de muy baja a moderada.
En comparación con no usar drenajes, no está claro si el uso habitual de drenajes tiene algún efecto en la mortalidad a los 30 días o en las complicaciones posoperatorias tras la cirugía pancreática. En comparación con no usar drenajes, la evidencia de certeza baja indica que el uso habitual de drenajes podría reducir la mortalidad a los 90 días. En comparación con los drenajes pasivos, la evidencia es muy incierta con respecto al efecto del drenaje activo en la mortalidad a los 30 días o en las complicaciones posoperatorias. En comparación con el retiro tardío del drenaje, el retiro temprano podría reducir la tasa de infección intraabdominal, la morbilidad y la duración de la estancia hospitalaria en personas con bajo riesgo de fístula pancreática posoperatoria, pero la evidencia es muy incierta.
Los drenajes quirúrgicos son una práctica muy habitual después de la cirugía pancreática. La función del drenaje abdominal profiláctico para reducir las complicaciones posoperatorias tras la cirugía pancreática es controvertida. Esta es la tercera actualización de una revisión Cochrane previamente publicada para abordar los beneficios inciertos del drenaje abdominal profiláctico en la cirugía pancreática.
Evaluar los efectos beneficiosos y perjudiciales del drenaje abdominal habitual tras la cirugía pancreática, comparar los efectos de diferentes tipos de drenajes quirúrgicos y evaluar el momento óptimo para retirar el drenaje.
En esta revisión actualizada se volvieron a hacer búsquedas en CENTRAL, MEDLINE, Embase, Science Citation Index Expanded, y en la Chinese Biomedical Literature Database (CBM) hasta el 8 de febrero de 2021.
Se incluyeron todos los ensayos controlados aleatorizados (ECA) que compararan el drenaje abdominal versus ningún drenaje abdominal en personas sometidas a cirugía pancreática. También se incluyeron ECA que compararan diferentes tipos de drenajes y diferentes previsiones de retiro de drenaje en participantes con cirugía pancreática.
Dos autores de la revisión, de forma independiente, identificaron los estudios para la inclusión, recopilaron los datos y evaluaron el riesgo de sesgo. El metanálisis se realizó con el programa informático Review Manager 5. Se calculó la razón de riesgos (RR) para los desenlaces dicotómicos y la diferencia de medias (DM) o la diferencia de medias estandarizada (DME) para los desenlaces continuos con intervalos de confianza (IC) del 95%. Para todos los análisis, se utilizó el modelo de efectos aleatorios. Se utilizó el método GRADE para evaluar la certeza de la evidencia de desenlaces importantes.
Se identificaron en total nueve ECA con 1892 participantes.
Uso de drenaje versus ningún drenaje
Se incluyeron cuatro ECA con 1110 participantes asignados al azar al grupo con drenaje (n = 560) y al grupo sin drenaje (n = 550) tras una cirugía pancreática. Evidencia de certeza baja indica que el uso de drenajes podría reducir la mortalidad a los 90 días (RR 0,23; IC del 95%: 0,06 a 0,90; dos estudios, 478 participantes). En comparación con el no usar drenajes, evidencia de certeza baja indica que el uso de drenajes podría dar lugar a poca o ninguna diferencia en la mortalidad a los 30 días (RR 0,78; IC del 95%: 0,31 a 1,99; cuatro estudios, 1055 participantes), la tasa de infección de la herida (RR 0,98; IC del 95%: 0,68 a 1,41; cuatro estudios, 1055 participantes), la duración de la estancia hospitalaria (DM -0,14 días; IC del 95%: -0,79 a 0,51; tres estudios, 876 participantes), la necesidad de realizar otras operaciones abiertas por complicaciones posoperatorias (RR 1,33; IC del 95%: 0,79 a 2,23; cuatro estudios, 1055 participantes) y en la calidad de vida (105 puntos versus 104 puntos; medido con el cuestionario de calidad de vida específico para el páncreas [escala de 0 a 144, los valores más altos indican una mejor calidad de vida]; un estudio, 399 participantes). Hubo una complicación relacionada con el drenaje en el grupo de drenaje (0,2%). Evidencia de certeza moderada indica que el uso del drenaje probablemente produzca poca o ninguna diferencia en la morbilidad (RR 1,03; IC del 95%: 0,94 a 1,13; cuatro estudios, 1055 participantes). La evidencia fue muy incierta con respecto al efecto del uso de drenajes en la tasa de infección intraabdominal (RR 0,97; IC del 95%: 0,52 a 1,80; cuatro estudios, 1055 participantes; evidencia de certeza muy baja), y en la necesidad de realizar intervenciones radiológicas adicionales por complicaciones posoperatorias (RR 0,87; IC del 95%: 0,40 a 1,87; tres estudios, 660 participantes; evidencia de certeza muy baja).
Drenaje activo versus pasivo
Se incluyeron dos ECA con 383 participantes asignados al azar a un grupo de drenaje activo (n = 194) y un grupo de drenaje pasivo (n = 189) tras una cirugía pancreática. En comparación con el drenaje pasivo, la evidencia es muy incierta con respecto al efecto del drenaje activo sobre la mortalidad a los 30 días (RR 1,23; IC del 95%: 0,30 a 5,06; dos estudios, 382 participantes; evidencia de certeza muy baja), la tasa de infección intraabdominal (RR 0,87; IC del 95%: 0,21 a 3,66; dos estudios, 321 participantes; evidencia de certeza muy baja), la tasa de infección de la herida (RR 0,92; IC del 95%: 0,44 a 1,90; dos estudios, 321 participantes; evidencia de certeza muy baja), la morbilidad (RR 0,97; IC del 95%: 0,53 a 1,77; dos estudios, 382 participantes; evidencia de certeza muy baja), la duración de la estancia hospitalaria (DM -0,79 días; IC del 95%: -2,63 a 1,04; dos estudios, 321 participantes; evidencia de certeza muy baja), y la necesidad de realizar otras operaciones abiertas por complicaciones posoperatorias (RR 0,44; IC del 95%: 0,11 a 1,83; dos estudios, 321 participantes; evidencia de certeza muy baja). No hubo complicaciones relacionadas con el drenaje en ninguno de los grupos.
Extracción del drenaje temprana versus tardía
Se incluyeron tres ECA con 399 participantes con bajo riesgo posoperatorio de fístula pancreática, asignados al azar a un grupo de retiro temprano del drenaje (n = 200) y un grupo de retiro tardío del drenaje (n = 199) tras una cirugía pancreática. En comparación con el retiro tardío del drenaje, la evidencia es muy incierta con respecto al efecto del retiro temprano del drenaje sobre la mortalidad a los 30 días (RR 0,99; IC del 95%: 0,06 a 15,45; tres estudios, 399 participantes; evidencia de certeza muy baja), la tasa de infección de la herida (RR 1,32; IC del 95%: 0,45 a 3,85; dos estudios, 285 participantes; evidencia de certeza muy baja), los costes hospitalarios (DME -0,22; IC del 95%: -0,59 a 0,14; dos estudios, 258 participantes; evidencia de certeza muy baja), la necesidad de realizar otras operaciones abiertas por complicaciones posoperatorias (RR 0,77; IC del 95%: 0,28 a 2,10; tres estudios, 399 participantes; evidencia de certeza muy baja) y la necesidad de realizar otras intervenciones radiológicas por complicaciones posoperatorias (RR 1,00; IC del 95%: 0,21 a 4,79; un estudio, 144 participantes; evidencia de certeza muy baja). Se observó que el retiro temprano del drenaje podría reducir la tasa de infección intraabdominal (RR 0,44; IC del 95%: 0,22 a 0,89; dos estudios, 285 participantes; evidencia de certeza muy baja), la morbilidad (RR 0,49; IC del 95%: 0,30 a 0,81; dos estudios, 258 participantes; evidencia de certeza muy baja) y la duración de la estancia hospitalaria (DM -2,20 días; IC del 95%: -3,52 a-0,87; tres estudios, 399 participantes; evidencia de certeza muy baja), pero la evidencia fue muy incierta. Ninguno de los estudios informó sobre complicaciones relacionadas con el drenaje.
La traducción de las revisiones Cochrane ha sido realizada bajo la responsabilidad del Centro Cochrane Iberoamericano, gracias a la suscripción efectuada por el Ministerio de Sanidad del Gobierno de España. Si detecta algún problema con la traducción, por favor, contacte con comunica@cochrane.es.