Mensajes clave
No se sabe si las inmunoglobulinas (un preparado elaborado con anticuerpos de personas que se han recuperado del virus respiratorio sincitial) reducen las muertes de niños muy pequeños hospitalizados por una infección pulmonar por virus respiratorio sincitial.
Las inmunoglobulinas tienen un efecto escaso o nulo sobre el tiempo que permanecen hospitalizados los niños pequeños con una infección pulmonar por el virus respiratorio sincitial.
Los ocho estudios incluidos en esta revisión investigaron a niños pequeños en centros en países de ingresos altos donde la tasa de mortalidad por esta enfermedad es baja, y solo dos estudios incluyeron también un centro en un país de ingresos medios. Por tanto, no se sabe hasta qué punto es eficaz el tratamiento para los niños pequeños de los países de ingresos bajos, donde la tasa de mortalidad por infección pulmonar por el virus respiratorio sincitial es más elevada.
Las pruebas actuales no apoyan el uso de inmunoglobulinas como tratamiento para niños pequeños hospitalizados con una infección pulmonar por virus respiratorio sincitial.
¿Qué es el virus respiratorio sincitial (VRS)?
El virus respiratorio sincitial es un virus común que puede infectar los pulmones y las vías respiratorias. En lactantes y niños muy pequeños, la infección por VRS puede provocar síntomas de fiebre, tos, secreción nasal, sibilancias, dificultad para respirar y dificultad para alimentarse. El resultado puede ser la hospitalización, el ingreso en una unidad de cuidados intensivos y la muerte.
¿Qué se quiso averiguar?
Se quiso saber si las inmunoglobulinas son un tratamiento eficaz y útil para los niños muy pequeños que ingresan en el hospital con una infección pulmonar por VRS confirmada por pruebas de laboratorio.
El interés se centró en determinar:
- la muerte del niño por cualquier causa durante la estancia hospitalaria o después de haber abandonado el hospital;
- la duración de la hospitalización de los niños; y
- los efectos no deseados del tratamiento con inmunoglobulinas.
¿Qué se hizo?
Se buscaron estudios que compararan inmunoglobulinas (de cualquier tipo) con un medicamento falso que no contuviera ningún principio activo (placebo) en lactantes y niños pequeños de hasta tres años de edad. Los estudios podían haberse realizado en cualquier lugar del mundo.
Se compararon y resumieron los resultados de los estudios. En la medida de lo posible, los resultados de los estudios se agruparon (combinaron) para analizarlos. Se utilizó un método estandarizado para calificar la confianza en las pruebas, que se basa en las características del estudio: como se diseñó, el número de personas incluidas, etc.
¿Qué se encontró?
Se encontraron ocho estudios que incluyeron 906 lactantes y niños pequeños. Cinco de los estudios se realizaron en uno o más localizaciones de estudio de un país de ingresos altos. Tres estudios se llevaron a cabo en centros de distintos países. Los tres incluían centros de países de ingresos altos, y solo dos incluían también un centro de un país de ingresos medios.
No se sabe con certeza si las inmunoglobulinas afectan o no al riesgo de muerte durante la estancia en el hospital o tras salir del hospital.
Se observó que las inmunoglobulinas apenas suponían una diferencia en la duración de la hospitalización de los lactantes y niños pequeños con infección pulmonar por VRS.
Se observó que podría haber poca o ninguna diferencia en los efectos no deseados entre las inmunoglobulinas y el tratamiento falso.
¿Cuáles son las limitaciones de las pruebas?
Existen muchas dudas sobre los efectos de las inmunoglobulinas en la mortalidad debido a las pocas muertes que se produjeron en los estudios. Se necesitan estudios que incluyan a varios cientos o incluso miles de lactantes y niños pequeños para averiguar si las inmunoglobulinas afectan al riesgo de muerte entre los lactantes y niños pequeños hospitalizados por una infección pulmonar por VRS.
Se tiene más confianza en las pruebas de los efectos de las inmunoglobulinas en la duración de la estancia hospitalaria, pero existen algunas dudas sobre la forma en que se diseñaron y realizaron los estudios.
Los estudios investigaron principalmente a niños pequeños en países de ingresos altos (solo dos estudios incluyeron un centro en un país de ingresos medios), por lo que los resultados podrían no aplicarse a lactantes y niños pequeños en países de ingresos bajos, donde el riesgo de morir por infección pulmonar por VRS es mayor.
Hubo diferencias en el tipo de tratamientos con inmunoglobulina utilizados en los estudios y diferencias en el grado de enfermedad de los niños incluidos en los estudios. No fue posible investigar si estos factores afectaron al funcionamiento del tratamiento debido al escaso número de estudios incluidos en la revisión.
¿Cuál es el grado de actualización de estos datos?
Esta es la tercera versión de esta revisión. Las pruebas están actualizada hasta el 2 de diciembre de 2022.
Existen muchas dudas sobre el efecto de las inmunoglobulinas en la mortalidad. Existe una certeza moderada de que el uso de inmunoglobulinas en lactantes y niños hospitalizados podría suponer una diferencia escasa o nula en la duración de la hospitalización. Es posible que las inmunoglobulinas produzcan poca o ninguna diferencia en los eventos adversos, la necesidad o la duración de la asistencia respiratoria mecánica, la necesidad de oxígeno suplementario o el ingreso en la UCI, aunque no se tiene confianza en esta evidencia y el verdadero efecto de las inmunoglobulinas sobre estos desenlaces podría diferir marcadamente del efecto estimado observado en esta revisión. Todos los ensayos se realizaron en países de ingresos altos y faltan datos sobre las poblaciones en las que la tasa de mortalidad por infección por VRS es mayor.
Cada año, millones de niños son hospitalizados debido a la infección por el virus respiratorio sincitial (VRS). El tratamiento es paliativo y los tratamientos actuales (p. ej., broncodilatadores inhalados, epinefrina, solución salina hipertónica nebulizada y corticosteroides) son ineficaces o tienen un efecto limitado. La inmunoglobulina para el virus respiratorio sincitial puede utilizarse de manera profiláctica para prevenir el ingreso hospitalario por enfermedad relacionada con el VRS. Se puede considerar para el tratamiento de la infección por el VRS grave confirmada o para el tratamiento de un receptor inmunocomprometido, aunque no está autorizado para este fin. No está claro si las inmunoglobulinas mejoran los desenlaces cuando se utilizan para tratar la infección confirmada por VRS en lactantes y niños pequeños ingresados en el hospital. Esta es una actualización de una revisión publicada por primera vez en 2019.
Evaluar los efectos de las inmunoglobulinas para el tratamiento de las infecciones confirmadas de las vías respiratorias inferiores por el VRS en niños de hasta tres años de edad ingresados en el hospital.
Para esta actualización de 2022, se realizaron búsquedas en el Registro Cochrane central de ensayos controlados (Cochrane Central Register of Controlled Trials; CENTRAL), que contiene el Registro especializado del Grupo Cochrane de Infecciones respiratorias agudas (Cochrane Acute Respiratory Infections), Ovid MEDLINE, Embase, CINAHL y Web of Science (desde su inicio hasta el 2 de diciembre de 2022), sin restricciones. Se realizaron búsquedas de ensayos en curso en dos registros de ensayos (hasta el 2 de diciembre de 2022) y se verificaron las listas de referencias de las revisiones y los artículos incluidos en busca de estudios adicionales.
Ensayos controlados aleatorizados que compararon inmunoglobulinas con placebo en recién nacidos hospitalizados y niños de hasta tres años de edad con infección de las vías respiratorias inferiores por el VRS diagnosticada por laboratorio.
Dos autores de la revisión, de forma independiente, seleccionaron los ensayos, evaluaron el riesgo de sesgo y extrajeron los datos. La certeza de la evidencia se evaluó mediante el método GRADE.
En total, se incluyeron ocho ensayos con 906 neonatos y niños de hasta tres años de edad. Se incluyó un ensayo nuevo en esta actualización. Los preparados de inmunoglobulina utilizados en estos ensayos incluyeron inmunoglobulina anti-VRS y los preparados de anticuerpos monoclonales palivizumab y motavizumab. Cinco ensayos se realizaron en uno o varios centros de un único país de ingresos altos (cuatro en EE. UU. y uno en Catar). Tres ensayos incluyeron localizaciones del estudio en diferentes países. Los tres ensayos incluían centros del estudio en uno o más países de ingresos altos (EE. UU., Chile, Nueva Zelanda, Australia, Catar), y dos ensayos también incluían un centro del estudio en un país de ingresos medios (Panamá). Cinco de los ocho estudios fueron "financiados" o "patrocinados" por los fabricantes del fármaco del ensayo.
La evidencia es muy incierta para el efecto de las inmunoglobulinas sobre la mortalidad (razón de riesgos [RR] 0,87; intervalo de confianza [IC] del 95%: 0,14 a 5,27; cuatro estudios, 309 participantes). Se produjeron cuatro muertes: dos entre los 98 niños que recibieron inmunoglobulinas y dos entre los 98 que recibieron placebo. Se produjo otra muerte en un cuarto ensayo, pero se desconocía el grupo de estudio del niño y los datos no se incluyeron en el análisis (evidencia de certeza muy baja).
El uso de inmunoglobulinas en lactantes y niños ingresados en el hospital con IVRI por VRS confirmada probablemente produce poca o ninguna diferencia en la duración de la hospitalización (diferencia de medias [DM] -0,13 días; IC del 95%: -0,37 a 0,12; seis estudios, 737 participantes; evidencia de certeza moderada).
Las inmunoglobulinas podrían dar lugar a una diferencia escasa o nula en el número de niños que experimentan uno o más eventos adversos de cualquier gravedad en comparación con placebo (RR 1,18; IC del 95%: 0,78 a 1,78; cinco estudios, 340 participantes; evidencia de certeza baja) o en el número de niños que experimentan uno o más eventos adversos considerados graves por los investigadores del estudio, en comparación con placebo (RR 1,08; IC del 95%: 0,65 a 1,79; cuatro estudios, 238 participantes; evidencia de certeza baja).
La certeza de la evidencia para los desenlaces secundarios fue baja. Esta evidencia indica que el uso de inmunoglobulinas produce poca o ninguna diferencia en la necesidad o duración de la ventilación mecánica y en la necesidad o duración del oxígeno suplementario. El uso de inmunoglobulinas no reduce la necesidad de ingreso en la unidad de cuidados intensivos (UCI) y, cuando los niños ingresan en la UCI, la diferencia en la duración de la estancia es escasa o nula.
La traducción de las revisiones Cochrane ha sido realizada bajo la responsabilidad del Centro Cochrane Iberoamericano, gracias a la suscripción efectuada por el Ministerio de Sanidad del Gobierno de España. Si detecta algún problema con la traducción, por favor, contacte con comunica@cochrane.es.